08/03/2017. Sociedad Económica de Amigos del País
Entrevista Rosa Parra. Fotos Alex Zambrano
Presina Pereiro nos habla de su novela No dejes de buscarme, que próximamente, el día 8 de Marzo de 2017, presentará en la Sociedad Económica de Amigos del País de Málaga, sito en la Plaza de la Constitución.
La novela de Presina Pereiro, No dejes de buscarme es una apasionante historia muy bien entramada, en la que los personajes están perfectamente definidos, con la naturalidad que le dan sus actos y pensamientos, y sobre todo con la emoción contenida que se esconde entre estos dos aspectos que, sin artificio literario, son en verdad los que definen a los seres humanos en la vida real. Además, por supuesto, de sus circunstancias vitales; en este caso, dos épocas cronológicas diferentes de una España que todos conocemos, pero cuya historia política, ética, religiosa, filosófica, social, artística y económica varia de unas etapas a otras y por tanto revierten de diferente forma en una sociedad marcada por la guerra civil, la dictadura o la democracia. Y en las sagas familiares se puede pasar del absolutismo unilateral y patriarcal a la desubicación o a la pluralidad o al descontrol, dependiendo de en qué generación nos encontremos y no precisamente en función del paso del tiempo, sino en función del paso de la vida y de las circunstancias que ya acabo de mencionar. Entre estas circunstancias nos encontramos, además de lo externo/social, lo interno-sentimental-psicológico-genético que esta novela refleja tan excelentemente de forma implícita. Este es el subtexto que subyace en cada capítulo que nos cuenta una historia y a la vez nos desvela lo que hay detrás de ella, con una maestría que solo caracteriza a los grandes escritores.
Es una gran contadora, que engancha con las vicisitudes de sus personajes a la vez que instruye de forma sutil del andamiaje psicoafectivo que los sustenta. Ella misma, la escritora, parece un personaje de sus novelas, con una vida intensa y llena de superación, empeño y logros profesionales. Es una malagueña, que ya casada y con dos hijos, se empeñó en estudiar y se licenció en Filosofía y Letras. Su tesis, centrada en el siglo XVI, fue becada por el CSIC y ella adscrita como investigadora histórica. Fue profesora universitaria de historia. Feminista practicante y afiliada, activista social y política… Colaboradó en publicaciones como Jábega o Baetica. Un sinfín de cosas que parece imposible compaginar con una familia, pero que ella no solo ha hecho posible, sino que además ha ampliado escribiendo libros. En total ha escrito 5 novelas, pero tiene otras a medio escribir, otra en proyecto de publicar, dos ya publicadas (Vida cotidiana y Realidad histórica e invención literaria, en torno a la mujer, este último escrito en colaboración). Por si todo esto fuera poco, además pinta unos cuadros con una estética muy característica que los personaliza y a la vez los inscribe dentro de su universo, al que voy a llamar desde ahora “el universo Presina”, un lugar de esta galaxia, aunque parezca de otra, que te atrapa engolosinada a la dulce capacidad fabuladora de la escritora y a la sabrosa humanidad desbordante y cálida de la persona. La calidad de su pintura es tal, que la editora de su libro (Ediciones Albores) ha decidido que sea uno de sus cuadros el que dé portada a la novela de la que estamos hablando.
Presina es una persona y un personaje a la vez, entrañable, culto, intelectual y en proyección continua. Sus actos son raíces cúbicas que multiplican sus experiencias vitales. Esta hiperactividad la vuelca en sus novelas, proporcionándonos a los lectores toda una gama de historias, circunstancias y contextos políticos-geográficos (también es una pertinaz viajera)
Espero que se lean su obra, para que comprueben como atrapa desde la primera página.
Aforo Libre: El título de la novela, No dejes de buscarme, parece indicar que vamos a encontrarnos con una historia intimista. Pero desde el principio queda claro que eso solo es una faceta del argumento ¿cierto?
Presina Pereiro: Por supuesto; solo un aspecto, yo diría que esta es una narración de entramado múltiple.
AL: Cuando dices “entramado múltiple” ¿hablas de complejidad?
P: No, creo que no; es de fácil lectura, ágil, engancha, eso dicen. Cierto que trata múltiples aspectos de la conducta humana, pero de una forma amena, sencilla y sin artificios. Si tuviese que definirla diría que es una novela dúctil; no sé si existe ese término, pero es justo lo que quiero decir, una novela flexible, que cada lector interpretará bajo su propia perspectiva.
AL: Supongo que te refieres a que los personajes son individuos normales con las dificultades cotidianas en nuestra sociedad y con los conflictos intrínsecos a la naturaleza humana, los conflictos universales. Eso despierta simpatía, es fácil identificarse con cualquiera de ellos.
P: No podría expresarlo mejor. Marta es una periodista mal pagada, Mariate una presentadora en paro, una freelance, Soledad una mujer madura, enferma y atendida por una chica boliviana, Manolo un becario, María Antonia una esposa, una madre, una mujer sometida; Rosa es la voz sabia, Louise una artista, una mujer sola y abierta, Amanda una víctima de las libertades controladas y así todos. Cada uno con sus problemas; iguales a las personas con quienes nos cruzamos cada día.
AL: En la novela introduces temas tan sensibles como el suicidio, la homosexualidad, el cáncer, la religión o la falta de creencias ¿ha sido complicado ensamblarlo?
P: Más que difícil un reto; lo complicado ha sido convivir tanto tiempo con estas personas complejas, poliédricas e inquietas que bullían en mi cabeza tratando de salir, y de convencerme de su punto de vista, son como hijos; y quieres advertirles y evitarles dolor... y no puedes. Una sensación parecida 
a saber que alguien por quien sientes afecto se equivoca y no puedes impedirlo. Bernardo me ha quitado el sueño más de una noche, es un ser tan tierno que enamora, más allá de su ideología, tendencias sexuales o políticas.
AL: La novela de desarrolla en dos épocas con evidentes paralelismos según pareces proponer ¿cierto?
P: Sí, en mi opinión hay ciertas similitudes; son dos períodos de crisis que se proyectan en las calles; la de comienzos del siglo XX todos sabemos lo que trajo consigo, de la actual, de la del este siglo XXI, aun no conocemos el final.
AL: Pero tú apuntas que tampoco será mucho mejor.
P: Como dice mi tía: “yo ahí no entro”; dejo la conclusión en manos del lector. Simplemente trato de recrear las dos épocas y es Marta la que, al introducirse a fondo en el pasado, reflexiona sobre el futuro. En ella se repite el mismo proceso que llevó a Bernardo hasta el suicido. Debe ser difícil intuir que nos acercamos a una quiebra en nuestro modo de vida, en nuestra sociedad del bienestar, suponer que tienes la información precisa para evitarlo y no saber cómo hacerla llegar a las manos adecuadas.
AL: Esa faceta de la novela es inquietante. Según esa profecía, se acerca el tiempo del cambio; supongo que es pura ficción.
P: Yo también, eso espero. Solo pretendo hacer reflexionar sobre la deriva de nuestro sistema. Eso es todo, he utilizado ese escrito con el único propósito de crear intriga y que el lector forje sus propias deducciones.
AL: Estoy repasando mentalmente la novela y no sé en qué género encuadrarla ¿Dónde encaja?
P: No es una novela de género; en realidad son dos historias de distintas épocas que se unen a través de un óleo perdido. Lo interesante es que a la vez que se conocen algunos indicios sobre la vida del pintor descubrimos su época, la caída de la II República, la guerra civil, los comienzos del franquismo. Con el pintor recorremos Barcelona, París, Albi, Florencia, con él conocemos a Sartre, la Beauvoir, Camus, el infierno de Dante y los poemas de amor de Miguel Ángel. Con él amamos a André y a Louise, vibramos con su arte y nos atormenta su desesperanza. A la vez, el amor, la política, el arte, los entresijos del alma; no sé. No es de género.
AL: Ya veo que te entusiasma el mundo de Bernardo, parece que lo prefieres a la otra historia, a la de Marta.
P: ¿Esa es la impresión que te trasmito? Me gusta la Historia, la historia con mayúsculas. El ambiente de Marta también es inquietante, sobre todo cuando en su mente se funde con el de Bernardo, entonces es cuando quiero advertirla, cuando de hecho utilizo Joaquín para advertirla. Pero ella es fuerte, es ambiciosa, lucha mientras que Bernardo sucumbe. Le advierto de que puede llegar al suicidio.
Dejo a Presina Pereiro con la sensación de que me ha faltado tiempo para hablar de sus otras novelas y de su vida…de su concepto de la sociedad y de las personas que la conforman; de reflexionar con ella sobre la política actual, el feminismo y la evolución mundial a todos los niveles que se vislumbra en la actualidad. Por todo esto, y porque creo firmemente que es uno de nuestros talentos malagueños, la emplazo a continuar entrevistándola. Una buena ocasión sería el próximo 8 de marzo, que presenta su novela en la Sociedad Económica de Amigos del País de Málaga. (Plaza de la Constitución)
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