28/07/2016. Museo Pompidou.
Texto: Rosa Parra Moreno | Fotos: Laura Fernández Pereiro
Zenet recibe muy amablemente a Aforo Libre en medio de uno de sus ensayos, en concreto en el que hace antes de la presentación de su nuevo disco, Si sucede, Conviene, en el Museo Pompidou, en un evento organizado por Fnac (#NocheEnElMuseoConFnac) para un público reducido, afortunado de contarse entre su clientela. Zenet, con uno de sus eternos sombreros, nos atiende y canta, canta y habla, seduce con su voz, con sus anécdotas y con su gestualidad, esa misma que impregna de corporalidad todas sus actuaciones.
Zenet está pletórico, no solo porque disfruta con lo que hace y lo que hace lo hace muy bien, con gran repercusión artística y con gran número de seguidores, sino también porque ha dado un giro a su vida personal, lo que ha repercutido indudablemente en la profesional. Hasta su aspecto tiene un brillo especial que envuelve su mirada pícara.
Aforo Libre: ¿Cuál es ese cambio del que hablas en los medios?
Zenet: Pues un cambio, que ha sobrevenido solo, en parte por mis circunstancias vitales actuales y en parte impulsado por mi voluntad de dar un giro a mi vida. Es un cambio de lo nocturno a lo diurno. Ahora aprovecho más el día, para poder estar con mi hijo más tiempo y disfrutarlo; y eso ha conllevado otra serie de cambios en mis rutinas diarias y en mi forma de componer y de cantar. Es un cambio de ciclo, cierro uno y abro otro. Por supuesto que este nuevo disco sigue siendo muy zenet, eso es inevitable, pero considero que es necesario sanar para poder cerrar limpiamente y abrirse a otra cosa renacido y fresco, ligero, sin lastres.
A.L.: ¿En qué canciones se refleja por ejemplo este cambio?
Z: Pues por ejemplo en “Cien veces prefiero” que es toda una declaración de intenciones, con letras muy gráficas, muy del estilo de Javier Laguna (su compositor fetiche de letras, junto con José Taboada –compositor- al que se añade en escena el excelente trompetista cubano Antonio Machado, y el mismo Zenet -voz y arreglos-)
A.L.: ¿Qué hay de ti y qué de los demás miembros de tu banda en tu trayectoria artística, ya que todos siguen contigo prácticamente desde los inicios?
Z: Pues hay una mezcla muy grande que a veces no sé ni diferenciar, hay mucha interferencia mental, Laguna y yo nos conocemos tan bien que no hacen falta palabras. Él sabe el momento que estoy viviendo y lo traduce en palabras, Taboada y yo lo musicamos. No te puedo decir de esta línea a esta otra es mío y de allí para debajo de él. Trabajamos mucho en grupo y cambiamos y nos enriquecemos mutuamente.
A.L.: Y todo eso lo vives de una manera muy actoral en escena, son como partituras de movimientos que te definen y a la vez definen a la canción de que se trate. ¿Qué hay de estudiado, qué de pose y qué de improvisación?
Z: Pues no hay mucha preparación, la verdad, es un movimiento orgánico que me sale así. Detrás hay un trabajo enorme de equipo, de buscar arreglos musicales y expresivos, pero luego fluyo en escena. Me sale así (Zenet embruja en escena, como actor que es, sabe hacer las pausas dramáticas y ensamblarlas con la pausa musical, susurra, entona, canta, se mueve de una manera tan personal e íntima que parece que canta solo para ti, yo pienso que esa es una de las claves de su éxito, ese carisma que desprende, lo que dice y cómo lo dice, y cómo suena)
A.L.: ¿Qué temas hay diferentes en esta nueva etapa?
Z: Pues temas de perdón, de reconciliación con personas y momentos, de nuevas perspectivas, de esperanza. El cambio se vislumbra ya desde la misma portada del disco, que la hemos estudiado mucho y está lleno de luz
A.L.: ¿Cuál sería el perfil de mujer que más te atrae, y se refleja en las letras que cantas y componéis al alimón? Observo en vuestras letras mujeres fuertes, o un poco malillas, las que nunca se entregan totalmente y dañan, las que seducen y dejan, a las que se admira por su personalidad. Parece que en general os seducen las que dan caña.
Z.: En ninguna en especial, como dijo el poeta: todas las mujeres están en una. Igual que un hombre está en todos. En el disco aparece la mamá, la Mata Hari, a la que se le pide perdón, la que se añora, la que se desea y no se tiene, la que enamora, la que tiene la culpa y la que no la tiene…está la vida entera ahí. Yo siempre digo que Laguna utiliza el amor para hablar de la vida y de la condición humana: la envida, la generosidad, la entrega, el rencor, el perdón, la honestidad. El no se corta a la hora de hablar, es muy honesto escribiendo.
A.L. ¿Cómo podemos seguir vuestro rastro, saber dónde y cuando actuáis?
Z.: Lo subimos todo a nuestra página web, a nuestro face book, utilizamos mucho las redes, porque nos gusta estar en contacto con nuestro público. El estreno oficial del disco lo vamos a hacer en el Teatro Apolo de Madrid. Será el punto de partida. Hoy estamos engrasando un poco a la banda.
A. L.: Sé que eres muy famoso en otros países, sobre todo latino americanos. ¿Cuál es el lugar donde más seguidores tienes?
Z: México, sin lugar a dudas. De Cuba tenemos al trompetista, un cubano con arte, Ahora queremos conquistar más Argentina, pero son fundamentalmente los mexicanos los que se entregan con el alma a un cantante, fíjate lo que está sucediendo allí con Juan Grabiel…
A.L.: ¿Cuál es el secreto de encontrar tu sello personal?
Z: Supervisar todo el proceso, participar en el , jugamos con la canción, le damos muchas vueltas a una canción hasta que la vestimos totalmente, pero poco a poco, con delicadeza, le das un punto de tango, o una evocación de milonga, a cada una le vamos dando lo que va pidiendo, porque al final Si sucede conviene. Hay alguna razón en el universo que provoca eso que estás viviendo, así que Si sucede conviene…
A.L.: Deseamos que este disco tenga la misma repercusión que todos los anteriores que lo han convertido en lo que es, un artista completo y entregado a su profesión, a la que adora y que nos transmite con pasión y ganas. La calidad de este nuevo trabajo se puso de manifiesto minutos después de acabar la entrevista, en el auditorio del Pompidou, que escuchó respetuosamente cada canción y que aclamó en muchos momentos al cantante y a su banda. Para la fotógrafa y para mí ha sido todo un lujo poder hablar con Zenet mientras sonaban en directo y de fondo acordes y melodías de su nuevo trabajo y él mismo canturreaba y afinaba, ensayando y calentando motores para su actuación. Le damos las gracias por su amabilidad y generosidad, no todos los artistas dejan que se vean los entresijos de su espectáculo.