05/12/2015. Teatro Cervantes.
Texto: Carlos Guerrero | Fotos: web
La Orquesta Filarmónica de Málaga interpreta la Obetura Las Hébridas, la Sinfonía Haffner y la Sinfonía nº2 de Sibelius en la séptima cita de abono de la temporada.
En su viaje a Escocia, F. Mendelssohn-Bartholdy, visitó la impresionante gruta de Fingal en la isla de Staffa, una de las Islas Hébridas. Impactado por la belleza del paraje natural, compuso este poema sinfónico como obertura.
La orquesta recreó notablemente las imágenes de soledad del primer movimiento o la agitación del oleaje del Mar de las Hébridas. Destacable el rango dinámico, aunque demasiado presente el viento metal en relación con la cuerda.
La Sinfonía nº 35 en re mayor, Kv. 385, de W. A. Mozart fue compuesta originalmente como serenata para conmemorar la entrega de un título nobiliario al alcalde de Salzburgo, Sigmund Haffner. Recogía material de la serenata compuesta años antes para la boda de la hija del alcalde, así como de su ópera El rapto en el Serrallo, compuesta en el mismo año (1782), de la que extrae motivos del aria de Osmín para crear el grandioso tema final de su sinfonía. En la segunda obra del programa, la reducción de la orquesta agilizó la masa sonora, dotando a la pieza del necesario aire galante. Muy cuidadas las dinámicas y las articulaciones en la cuerda, y excelente el papel de los vientos, en especial el fagot –no tan destacables las trompetas, que no tuvieron la tarde−. Sobresaliente la ejecución de la percusión, en los fraseos y en el control de las dinámicas.
La Sinfonía nº 2 en re mayor, op. 43 de Jean Sibelius fue compuesta en 1901 y constituye el fin de su etapa romántica. El compositor finlandés recurre a la fragmentación temática y a la recombinación de estos elementos para crear la dirección en su música. Innova así en la presentación de los temas de la forma sonata de su primer movimiento, así como en el lento que antecede al scherzo y al finale. El juego constante en los cambios de instrumento para repetir o continuar la frase exige la atención máxima de los músicos, que supieron dar homogeneidad a cada una de las partes sobre la que crece esta sinfonía que encuentra su clímax en un último movimiento grandioso. Disfrutaron los maestros desde los primeros acordes. Destacaremos de nuevo el papel de los vientos y el de los violonchelos en el scherzo y por la intensidad en los dos últimos movimientos.
La interpretación de la orquesta bajo la dirección de Georg Mark dejó momentos de inspiración que no se alcanzaron en otras citas. El director salzburgués supo llevar a los músicos a su terreno con claridad de gestos y un discurso musical coherente.
Orquesta Filarmónica de Málaga
Dirección: Georg Mark
Programa nº 7
Obertura en si menor, op. 26, "Las Hébridas". F Mendelssohn-Bartholdy
Sinfonía nº 35 en re mayor, kv. 385 "Haffner". W. A. Mozart
Sinfonía nº2 en re mayor, op. 43. J. Sibelius