11/12/2021. Teatro Cervantes.
Texto y fotos: Lui G. Marín
No hemos esperado 25 años, porque Carlos Núñez ha venido a Málaga en varias ocasiones, pero si hace ese tiempo desde que publicara en 1996 A irmandade das estrelas.
Este disco marcó un antes y un después en el conocimiento de la música celta en España, por parte del gran público. Aunó en este sublime trabajo la música folk gallega con la irlandesa, conectada con ese interminable hilo celta, y siempre influido por su experiencia anterior con The Chieftains, la gran banda de música tradicional irlandesa, comandada por Paddy Moloney, recientemente fallecido y cuyo espíritu inspirador sobrevoló el patio de butacas del Teatro Cervantes.
No en vano, en su concierto, Núñez acudió varias veces a la memoria de su mentor, en su regreso y reencuentro con el público malagueño.
Un reencuentro, como siempre, lleno de pasión, optimismo y un sentido festivo de la música, como pocos artistas son capaces de transmitir en un escenario. Toda una fiesta celta fue lo que se organizó en el teatro, una celebración de la música como ruptura de fronteras.
Los músicos participantes de esa fiesta fueron el canadiense Jon Pilatzke, reconocido bailarín y violinista que nos hizo una breve pero magistral lección de irish stepdance, danza tradicional irlandesa. Itsaso Elizagoien toca la trikitixa, una especie de pequeño acordeón. Pancho Álvarez las Guitarras, fídulas y voz, componente habitual de la banda de Carlos Núñez, desde 1995, y a su vez componente de Na Lúa, un grupo de música galega de los 80 y 90 y Xurxo Núñez a la Percusión, hermano de Carlos Núñez, con una gran trayectoria como multiinstrumentista y productor.
Todos ellos, tejieron gracias a ese hilo conductor celta el repertorio más conocido de Carlos Núñez, rememorando además de los temas de aquel disco emblemático, otras composiciones para películas o versiones clásicas pasados por el tamiz de la música celta.
Tampoco podían faltar canciones que todos podríamos tatarear como A Rianxeira.
Pero si no era suficiente lo que los músicos hacían sobre el escenario, en mitad del concierto, aparecieron por el fondo del patio de butacas una banda de gaiteros que rodearon al público interpretando el gran himno de la música celta Amazing Grace, un momento sobrecogedor y de gran impacto sonoro que dejó al público emocionado.
Afortunadamente un poco más tarde, volvieron a aparecer los gaiteros para sumarse a la fiesta y al resto de los músicos sobre el escenario.
Gran sorpresa fue conocer la procedencia de gran parte de los gaiteros, que hicieron gala de un gran sentido del humor, dando pie a uno de los momentos más hilarantes del concierto, cuando uno de los gaiteros mayores, pasa del inglés al perfecto andaluz, de hecho de Benalmádena y Gibraltar procedían la mayoría de los componentes de la banda de gaitas.
Carlos Núñez lleva toda su vida investigando la música celta, extrayendo melodías a veces olvidadas de los más lejanos rincones interconectados por la cultura celta, haciéndonos ver que en el lugar más insospechado podemos encontrar vestigios e influencias de esta conexión.
Pero es que además el músico no repara en explicaciones de cada uno de esos hallazgos, ello convierte cada concierto de Núñez, en toda una lección magistral de música celta, llena de sorpresas, y en entusiasmo desbordante. Un estusiasmo que llega al pçublico desde el minuto uno.
Carlos Núñez lleva desde 2014 sin publicar disco, su música es de escenario, de disfrutar en un directo, así que si toca cerca de donde vives, no dudes en unirte a su fiesta.
Carlos Núñez: Gaitas, flautas y ocarinas
Jon Pilatzke: Violín, voz y stepdance
Itsaso Elizagoien: Trikitixa
Pancho Álvarez: Guitarras, fídulas y voz
Xurxo Núñez: Percusión
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