13/10/2017. El Ojopatio.
Texto: Rosa Parra | Imagenes: El Ojopatio
Puidemar Group se forma y se conforma cada vez que tocan, Es un formoato abierto de banda. Esta vez solo se han reunido tres músicos. Un terceto atípico y singular a la vez, forman banda pero conservan su individualidad manifiesta en cada nota de cada uno de sus instrumentos: al contrabajo Antonio Dobon al saxo Paco Aguilar y a la bateria Ernesto Lasso de la Vega. Además los intérpretes usaron otros instrumentos y materiales u objetos de la vida cotidiana. Entre ellos el agua que muchas veces como susurro y otras como lamento se oía trabajada desde un recipiente
Esta historia comenzó a fraguarse hace años sin que ninguno de sus protagonistas lo supiera ni lo intuyera siquiera. Desde 2003-4 Don Juan Ramón Orense Tejada viene publicando en el Sur, sobre una temática única, el artículo trata sobre el Mar de Alborán y sus costas y una islita pequeña que existe en el y que fue base de un pirata tunecino desde donde operaba en sus diferentes abordajes para volver a esconderse en el aislamiento que le ofrecia ese trozo de isla que estaba justo en medio de alli donde su piratería podía ser posible. Este pirata era apodado Alboraní, que significa el tempestuoso. Igual que Alboran significa tempestad. De estos artículos surge la inspiración para que estos tres músico se unan y decidan improvisar teniendo como imaginario común este mar y todo lo que en el acontecen
Desde esa piratería legendaria a la vida marina y marinera, a esas aguas que unen y bañan dos continentes y por supuesto a las pateras cargadas de vidas humanas que son las que ahora transitan por ahí, suponiendo, a la vez, tumba o/y trampolín de cambio, en una apuesta trágica que debe plantearse cada ser antes de embarcarlas.
Todo ese trasfondo empaña y engalana a la par el concierto de esta noche en el Ojopatio, un lugar alternativo justo enfrente del parking Las Delicias, bocacalle de Carretería.
El texto sobre el Mar de Alboran que leyeron al princio ayudó a los presentes a situarse.
Lo demás es la combinación entre sonidos, presente inmediato, participantes de la impro y asistentes.
Todo fluye e influye para que nazca la música Como un regalo y como una forma de sensibilizar ante lo que está ocurriendo en la actualidad sobre el oleaje eterno e indiferente, absorto en su devenir de movimiento y vida submarina, del mar de Alborán. Situaciones originadas por diferentes aspectos socioeconómicos y políticos y ante las que nadie quiere mirar, por el dolor que provoca y que se puede y a veces también se quiere confundir con el desprecio a unas vidas humanas que viven en condiciones infrahumanas y se escapan de un no futuro, para optar a un futuro incierto, a la discriminación y al paro que les seducen detrás de ese mar; dones ensoñados como caídos del cielo que conducen a la libertad social
Dos costas: la africana y la española, unidas por una mar y una música que intentan definirlas, unos músicos que sintiendo la respiración de los presentes en el Ojo Patio, quieren interactuar con ellos para crear arte...el arte del momento presente, único e irrepetible.
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