Nov 11 2011

25 Festival Internacional de jazz de Málaga. Teatro Cervantes 08/11/2011

Un músico africano nacido en América

Texto: Daniel Lozano | Fotos: José M. Cortés

El concierto de anoche fue un viaje a las raíces del jazz en manos de un dinosaurio de este género, Randy Weston. El pianista nacido en Brooklyn lleva unas cinco décadas viajando a África, empapándose de ciertos elementos que pudimos disfrutar en todos los temas.

Randy dijo una vez que era “un músico africano nacido en América”. De ahí su interés por la música marroquí y egipcia entre otras, y que sin lugar a dudas, dejó buena muestra de ello en el concierto que ofreció en el que es ya el 25 Festival Internacional de jazz de Málaga.

Randy hizo gala de los orígenes del jazz acompañándose de dos músicos de perfil muy concreto: el  contrabajista panameño Alex Blake y el  percusionista norteamericano Neil Clarke. Ambos pretendieron junto al pianista neoyorkino la pureza de la música africana, haciendo uso de ostinatos (esquemas tanto rítmicos como melódicos que se repiten), de algunas polirrítmias (entre la percusión y el contrabajo sobre todo)  y de lo conocido como llamada y respuesta, tan presente en el género jazzístico.

El lenguaje no fue ostentoso, simplemente porque la propuesta partía de la sencillez que caracteriza a la música africana, pasando por el blues, el góspel, el bebop, el free e incluso el cha-cha-cha (en el cuarto tema). Tanta pureza hizo que el concierto no rompiese por ningún lado, y se reflejó en el ánimo del público, que anduvo frío en la totalidad del concierto.

Respecto al sonido, el concierto comenzó con un fallo imperdonable del técnico de sonido, dejando la música ambiente en casi todo el primer tema del concierto. Fue sutil pero ocurrió. El volumen estuvo acertado, pero no hubo equilibrio en los planos. No puede ser que una pandereta suene más que el contrabajo, cuando ésta lo único que hace es marcar a negra durante todo el concierto. Por lo demás correcto.

Teatro CervantesRandy fue muy discreto, no sé si serán sus hermosos 85 años, pero dejó mucho espacio a sus músicos sin que éstos llenaran su hueco. Alex Blake alternó elementos percusivos con otros melódicos, recordando a Stanley Clarke en algunos momentos, y ofreciendo momentos muy dulces combinados con otros más funk. Por otra parte, Neil Clarke destacó más por su actitud en el escenario que por su música. Se le fue el tiempo en algunas partes, no tuvo claro algún que otro final,  y hasta llegó a abrir un caramelo con una parsimonia total, sin tener en cuenta que estaba el micrófono justo delante. Aun así le puso pasión, y si no hubiese sido por él, el concierto hubiese sido un tostón, haciendo incluso cantar, al principio tímidamente, a un teatro a la mitad de su aforo, recurriendo a la llamada y respuesta africana para ir finalizando el concierto.

En definitiva, el concierto fue un elenco de músicas tradicionales, un paseo por el principio del jazz, y toda una carrera de uno de los pianistas más relevantes de los últimos tiempos en este género.


una imágen del percusionista durante el conciertoRANDY WESTON AND HIS AFRICAN RHYTHMS TRIO
Randy Weston: piano
Alex Blake: bajo
Neil Clarke: percusión africana


 

 

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