28/05/2017 Teatro Cervantes
Texto: Cristina Gandarias |Fotos: web Dani Martín
Dani Martín convierte las butacas del Cervantes en asientos de una vagoneta de montaña rusa
Hoy el Cervantes no presenta esa majestuosidad clásica propia del principal recinto teatral de una ciudad. Hoy se viste con filtros de instagram y da cabida a un público de lo más variopinto. Niños pequeños con sus padres, chicas y chicos jóvenes uniformados con camisetas hechas para la ocasión, mujeres adultas y algunos hombre, pero sobre todo féminas, e incluso vemos a gente mayor. Este chico, tiene ese algo que gusta, no en vano agotó las entradas en tiempo record.
Nos vamos a subir a la Montaña Rusa del señor Dani Martín. Ocupamos nuestros asientos y es como estar en la cola de la atracción. Nos hemos fijado en un grupo de chicas que vienen con unas camisetas negras en las que se puede leer "Viejas obsoletas" y todas se han plantado en la cabeza una felpa con orejas de conejo. No puedo evitar hacerles una minientrevista.
Aforo Libre: Hola, vosotras sois de un club de Fan, ¿Correcto?
Viejas Obsoletas: Más o menos. Es que Dani Martín no tiene club de fans, entonces, el oficial no existe, pero nosotras somos de las fans de verdad
A.L.: ¿Qué significa "Viejas Obsoletas"?
V.O.: (risas) Fue un tuit que nos puso Dani Martín, porque estabamos haciendo una broma en Twitter y nos contestó: "Sois unas viejas obsoletas"
A.L.: ¿Qué broma fue?
V.O.: Si, le dijimos que no nos gustaba su peinado, no nos gustaba su tupé, no nos gustaba la camisa de leopardo ni nada, no nos gustaba nada
A.L.: No os gustaba nada, pero aquí estáis....
V.O.: Si, venimos una desde Madrid, otra desde Sevilla, otra desde Florencia
A.L.: No os gusta nada, pero venís desde muy lejos
V.O.: No, no, no nos gusta nada ultimamente su "outfit" en los conciertos. Tiene que mejorar, pero ya se lo hemos dicho y sabemos que lo va a cambiar
A.L.: ¿Podéis explicar que es el "outfit"?
V.O.: Si, el "outfit" es aquello que se lleva puesto en una ocasión especial. Entonces, el "outfit" de Dani, de repente es una camisa de leopardo, con unos pantalones negros y unas zapatillas de purpurina. ¡Unas zapatillas de purpurina! (lo dicen mientras me enseñan las que ellas llevan puestas) ¿A quién se le ocurre?
A.L.: ¿Y las orejitas?
V.O.: Es un filtro de instagram que él utiliza. Hemos decidido que le vamos a copiar y nos vamos a poner todas las orejitas de conejo, para apoyarle y para modernizarnos. Nos hemos comprado las zapatillas de purpurina y las orejitas, para modernizarnos
A.L.: ¿Os falta algún disco de Dani Martín?
V.O.: No, ninguno, ninguno
A.L.: Pensé que como no os gusta, no tendríais ninguno
V.O.: (Entre risas) Si los tenemos pero son para tirarlos a la basura
Estas chicas son una muestra de lo que Dani mueve. Tienen nombre y apellidos: Sandra González Rodriguez, Elisa Millán, Gema Torres, Raquel Hernández Rojano, Sara Jiménez y Lorena Reyes. Ellas son unas de las tantas que el artista atiende, personalmente, a través de las redes. Pese a ser, probablemente el artista nacional, con más repercusión actualmente, es muy cercano, como hemos podido comprobar.
En el Teatro se respira un aire diferente del habitual. Cuando anuncian que faltan tres minutos para empezar, el público aplaude, cuando anuncian que queda un minuto, el teatro se viene abajo. Cuando se sube el telón, sabemos que quien viene es un rockstar que no va a decepcionar. Se escucha en off "La pelea es el día a día, la lucha, caer, levantarse, volver a caer, volver a levantarse" Salen los músicos y el señor Martín, el clamor es impresionante. Las ganas abre el concierto y cual montaña rusa nos sube a lo más alto para comenzar a sentir los contrastes de sensaciones que producen la alternancia del vértigo y la calma.
A un gesto de Dani el público responde al unísono con palmas arriba, palmadas, y por supuesto la prohibición de no hacer fotos y mantenerse sentado es incontrolable. Nada más que tú, Paloma, Dibujas, todas estan arropadas por el público, pero dan paso a Peter Pan y se produce uno de los momentos emotivos que desenmascaran al chulito. Así continúa todo el concierto subiendo y bajándonos e incluso poniéndonos boca abajo en algún looping por los rieles de su montaña rusa.
París, Mi Teatro, Pelear, Que se mueran de envidia. Está exultante incluso en este "horario de cantajuego" como él le llama a las 19.00 horas. La hora quizás no sea la más habitual para este tipo de concierto, pero una vez dentro del recinto, se te olvida, y la energía es la misma que a las diez de la noche. En el tercer piso sacan un cartel que dice "Dani no tienes huevos de subir a darme un beso" a lo que el responde "Nunca se sabe, todo puede ocurrir, si me dan unas cuerdas igual subo".
Madrid, Madrid, Madrid es la canción que sin ser escrita por él, lo representa en esencia. Aprovecha para leer más carteles de fans de las primeras filas y les brinda un guiño. Un "Te quiero" de otra fan del fondo recibe la pregunta "¿Pero mucho o poco? ¿De verdad o solo para un rato?" por parte del artista.
Un poquito de calma con Beatles y Stones, y otro poco de poesía urbana con Ahora para volver a la carga y dar un subidón. Desafiante, chulesco y canalla, le sobra un gesto para que todo el teatro se vuelva del revés con Romperás. Por las venas da paso a presentar a los músicos. Otro de los momentos que genera más complicidad entre el público. Todos acaban coreando "Coki Giménez vaya ritmo que tienes" al bateria que para mas inri es de Málaga; Desde Murcia el guitarra "Roberto Lavella tu siempre has sido una estrella", "Paco Salazar, guitarrista y pornostar"; al pianista "Iñaki García yo a ti un hijo te hacía".
El final del concierto lo protagonizan la versión de Los Rodriguez de Hace Calor cantada por los músicos con Dani a la guitarra, Ya nada volverá a ser como antes, Una foto en blanco y negro y La suerte de mi vida.
Para los bises, que por supuesto los hubo, y no uno sino dos, salió con su emblemática camiseta con la calavera y el lazo a lo Hello Kitty. El primer bis comienza emocionándonos con Mi lamento, que escribió dedicada a su hermana tras su muerte. A más de uno y de una nos desmontó su entereza y su ternura. Y así con el nudo en la garganta nos cantá Feel de Robbie Williams y termina con Guerra de pasos.
Queremos más, no ha servido de mucho el momento tierno que nos ha regalado en el primer bis. Este último tramo lo abre con Cero, después nos sorprende con unos artistas invitados de Málaga, Efecto Mariposa con quienes canta Emocional para terminar muy arriba, como no podía ser de otra manera, con Los charcos y serpentina para el final de esta historia.
Salimos a la calle y es de día, vuelta a la realidad. Es muy raro.
La montaña rusa
Dani Martín voz
Coki Giménez batería
Candy Caramelo bajo
Roberto Lavella guitarra
Paco Salazar guitarra
Iñaki García piano y teclado
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