20/01/2014. El mejor director de orquesta de este siglo ha fallecido esta mañana en Bolonia a los 80 años tras una larga enfermedad.
El prestigioso director italiano fue el sustituto de Karajan al frente de la Filarmónica de Berlín (1989-2002), revolucionando la orquesta y pintando un nuevo horizonte para la Música que amaba.
Profundamente humano y carismático fue nombrado senador vitalicio de Italia el pasado 30 de agosto y decidió destinar íntegramente su sueldo a la Escuela de Música de la pequeña localidad de Fiesole, en uno de sus últimos gestos de generosidad, demostrada día a día a lo largo de sus existencia, en la que llevó la música no solo a los más fastuosos auditorios sino también a los rincones más necesitados de su país y del mundo, considerando que «la educación musical es, en realidad, la educación del hombre».
Fundador de la Orquesta de del Festival de Lucerna, compuesta por los mejores músicos del planeta, deja inolvidables conciertos y numerosas grabaciones en video, entre las que destacamos su tratamiento de las sinfonías de Mahler y de Beethoven o la espiritualidad de sus Requiems. Hace cuatro años tras el final de la novena sinfonía de Mahler en el Festival de Lucerna de verano en la que el maestro terminó exhausto, el público, compungido por la trascendencia de la interpretación, fue incapaz de aplaudir hasta pasados cinco minutos de elocuente silencio; tal era el impacto de sus maravillosas direcciones más recientes, tras haber superado con éxito la fase más agresiva de un cáncer de estómago que le aportó una nueva concepción de la música y de la vida.
Claudio Abbado ha recibido los más importantes premios y reconocimientos honoríficos, pero por encima de todo se ha ganado el profundo respeto y amor de los músicos y de los amantes de la Música. Descanse en paz.
| Sin eventos |
Comentarios