Central de Actuantes. La Térmica. 20/04/2013
Una innovadora propuesta que renace nueva en cada funciónTexto: Manuel Torres Fernández | Fotos: Juan Jesús Pérez Mora | Vídeo: Miguel A. Barba
Una sala iluminada en rojo, y desprovista absolutamente de todo, con las butacas formando una semielipse alrededor del espacio escénico, es la propuesta que la compañía Simbolía Teatro de los Sentimientos presentó en La Térmica el pasado 19 y 20 de abril. La compañía apuesta por situar su espectáculo en lugares poco convencionales que lo acerquen al público, para romper con la separación público-actor.
Este vacío escenográfico hace de contrapunto con el lleno emocional, pues el desnudo íntegro de los actores no sólo es físico, sino también psíquico.
Santi Senso (también en la dirección) e Inés Blanco se entregan en cuerpo y alma a sus personajes para vivir el amor en sus diferentes caras. Unos jóvenes Romeo y Julieta tiernos e ingenuos, un Don Juan y Doña Inés más experimentados y cínicos, y un Hamlet y una Ofelia ahogados por los problemas. El ritual catártico se completa con una adaptación de la Divina Comedia de Dante. Este recorrido por los distintos clásicos está vivo, bebe del desnudo de los actores, bebe del espacio escénico y sobretodo bebe del espectador, que es un elemento más de la representación. La apuesta queda lejos del tradicional espectáculo al que se acude a ver tranquilamente desde la butaca. Aquí el público tiene cabida y libertad para moverse, hablar, y ser cocreadores del espectáculo. Los actores arriesgan, y en su interacción con el público pueden incomodarlo o abrazarlo, pero sobretodo lo sacudirán para traerlos al aquí y ahora. El desnudo de emociones se hace colectivo para todos los participantes, y una sensación moja como una suave llovizna (chirimiri que decimos por aquí) y se va extendiendo por el respetable. Es la sensación del amor, de hacer el amor. Y es que la desnudez es sólo una excusa para hablar del amor, repartirlo, y bañar con su sensación a los participantes. Como el propio Sense dijo “…la dramaturgia se está editando ahora mismo, pues todo el público es el autor de este acto íntimo.”
Para retratar en la medida de lo posible la atmósfera hemos de mencionar y de agradecer el chelo en directo de Cary Rosa, sobrio y perfectamente armonizado con lo que acontecía, poniendo el toque musical a la vivencia de todos los asistentes.
Tras finalizar el espectáculo, los miembros de la compañía abrieron un foro de charla para intercambiar emociones e impresiones, y prestaron sus cuerpos para que el público reflejara en ellos, pluma en mano, aquello que quisieran.
Simbolía Teatro de los Sentimientos arriesgó, y ganó, cosa que se estimaba difícil dadas las características del espectáculo que parecía solo apto para un espectador muy flexible y preparado para lo que se acontecía. Llegué a pensar que alguien se acabaría marchando por sentirse demasiado incomodado, por ejemplo con el altivo Don Juan que, al grito de “fóllame, penétrame, tócame” se lanzaba en toda su desnudez sobre un espectador. Nada más lejos. Se metieron totalmente al público en el bolsillo.
Simbolia Teatro de los Sentimientos (Actos íntimos)
Dirección: Santi Senso
Textos: José J. Serrano
Elenco: Santi Senso e Inés Blanco
Chelista: Cary Rosa
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