Domingo 15/06/2014. Sala Joaquín Eléjar
Texto: José antonio Triguero | Fotos: Web
¿Donde?
Sala Joaquín Eléjar. Colectivo Cultural Maynake. Calle San Juan Bosco. Málaga. Estreno de Los Inocentes, de Pablo Bujalance.
¿Quién?
Mel Rocher, soberbio, en el primer texto largo del autor (ya representó el micro El soñador). Andrea Vargas acompaña al enfermo del arte escénico que es Rocher. Los dirige Marina Devesa. ¿Qué es Los inocentes? Teatro, ni más ni menos.
¿Qué?
La dependencia, la necesidad de apoyo; en esencia, la sociedad. Una joven en problemas asiste a un enfermo terminal. Dos generaciones. Dos culturas. Dos escalafones sociales. Las diferencias entre los personajes hace dificil, a priori, la convivencia, el entendimiento y la comunicación. Sin embargo, los dos están unido por un firme cordón umbilical, sus propias contradicciones, sus propias obsesiones, sus secretos y la proximidad de la muerte, como hecho incuestionable pero también como pulsión.
¿Cómo?
Así las cosas, algo que parece que plantea problemas sociales o humanos, en realidad acaba por ser la constatación de la soledad a través del juego clásico entre apariencia y realidad. Y la realidad, hoy lo sabemos, es subjetiva o lo que es lo mismo, relativa. Traiciones a la memoria, intersecciones del lado oscuro, mentiras piadosas, estratagemas y chantajes, atan a lo largo de la obra a los dos protagonistas. En un sentido filosófico puede sentirse que son la misma persona, o mejor, que uno es la alegoría del otro. Para uno, el comienzo y para otro, el final.
¿Cuánto?
No se asusten por lo que digo, pero aprecien que es un texto tan sugerente que, ayudados por el planteamiento, la puesta en escena y la interpretación de los actores, se puede dar uno a estos excesos especulativos. Se habla de la vida y de lo revelador de los encuentros. La técnica cinematográfica utilizada y las referencias al cine negro, el sembrado de dudas y el revelado final de la verdad puesta en duda antes, por ejemplo, dan el marco cercano para una introspección sin trauma. Es decir, el espectador se lo lleva puesto a casa lo sepa o no lo sepa. Y es que al final, Los inocentes somos todos.
¿Cuando?
Cuando la obra actúa en nosotros como "el otro" y vemos nuestro reflejo.
Compañía: Teatro de la Orilla.
Dirección: Marina Devesa.
Autor: Pablo Bujalance.
Intérpretes: Mel Rocher, Andrea Vargas.