Ene 29 2015

El largo viaje del día hacia la noche. Mario Gas. Vicky Peña. Teatro Cervantes. XXXII Festival de Teatro de Málaga.24/01/2015. Teatro Cervantes. XXXII Festival de Teatro de Málaga.

El largo viaje del día hacia la noche, obra maestra del padre del realismo estadounidense Eugene O'Neill, en el Teatro Cervantes

Texto: Carmen Titos | Fotos: Daniel Pérez / TC

El largo viaje del día hacia la noche. Mario Gas. Vicky Peña. Teatro Cervantes. XXXII Festival de Teatro de Málaga.La familia, el núcleo familiar, es un lugar recurrente visitado en el arte, sobre todo en el cine y la literatura. Según Bertolucci la primera hipocresía es “por la familia”, Don Vito Corleone sentencia en El Padrino (Coppola) que la familia es “lo más importante” mientras comete atrocidades contra los miembros que la componen. La novela y el teatro reflejan las contradicciones, oscuros, hipocresía e insatisfacciones que surgen en el seno familiar: “Todas las familias felices se parecen, pero las infelices lo son cada una a su manera”, así empieza Anna Karenina de Leon Tolstoi.

En un día de agosto de 1912, James Tyrone (Mario Gas), célebre actor retirado, se rodea de su esposa Mary Cavan Tyrone (Vicky Peña) y sus dos hijos Jamie Tyrone (Alberto Iglesias) y Edmundo Tyrone (Juan Díaz) para pasar una velada que, conforme transcurre, se convierte en un combate descarnado en el que salen a relucir toda clase de demonios.

El drama realista, representado con los mismos códigos que en sus orígenes, funciona, tiene acogida. Esta vez, con la versión del texto de Borja Ortiz de Gondra. Se agotaron todas las localidades disponibles y hubo espectadores que se desplazaron cientos de kilómetros para asistir a la función. Los actores protagonistas son ampliamente conocidos, sí, pero además son muy buenos como transmite el boca a boca que llenó el teatro, y como termino de confirmar, destacando especialmente a Vicky Peña.

O’Neill es el paradigma del realismo en los Estados Unidos, influencia posterior para Arthur Miller y Tenessee Williams. Eugene O’Neill no sólo poseía un profundo conocimiento del teatro (era hijo de actor) también tenía una gran sensibilidad acerca de las inquietudes y aspiraciones de la sociedad estadounidense. En El largo viaje contamos con elementos autobiográficos ya que la propia madre del autor era una mujer depresiva a quien fue preciso internar y mantener con alucinógenos.

El largo viaje del día hacia la noche. Mario Gas. Vicky Peña. Teatro Cervantes. XXXII Festival de Teatro de Málaga.La materia-prima con la que jugamos es la realidad del ser humano occidental (depresión, desesperanza, tristeza, vacío, falta de perspectivas) provocando la identificación en el público y, también, levantando una ligera agitación sobre la cómoda butaca del elegante teatro, ya que O’Neill critica la hipocresía de la célula familiar burguesa hasta que llega a incomodar.

La escenografía, solemne, esencial y apropiada, cuenta con un elemento original; un practicable circular  irregularmente elevado sobre el que se desarrolla el grueso de la acción, esta rampa elimina la rectitud en los elementos, provoca una oblicuidad en la visión de los muebles y personajes ayudando a transmitir el estado de ánimo inestable y desequilibrado de los personajes. Colaborando así la escenografía con la interpretación de forma magistral para trasladar inquietud.

Debo mencionar las proyecciones de las transiciones, responsabilidad de Eduardo Moreno: poéticas, etéreas, vaporosas…, precisas, discretas y adecuadas además de muy bellas. Junto a la escenografía, indumentaria e iluminación forman un espacio visual compacto, coherente y exquisito.

El largo viaje del día hacia la noche. Mario Gas. Vicky Peña. Teatro Cervantes. XXXII Festival de Teatro de Málaga.

La obra se desarrolla en un espacio interior, los personajes transmiten su sensación de axfisia en el espacio cerrado. Como el título indica, la acción ocurre en un solo día, comienza por la tarde, va anocheciendo y acaba de madrugada. El conflicto se intensifica con la llegada de la noche. La noche es usada en la literatura como desembocante de situaciones inusitadas, fuera de la cotidianeidad; el ocaso favorece que ocurran hechos ajenos a la rutina que exige la luz del día. Un ejemplo cinematográfico estaría en la película After Hours, de Martin Scorcesse, un ejemplo en teatro francés contemporáneo; En la soledad de los campos de algodón de Bernard-Marie Koltès.

La noche es para dormir. Y contrariar esto, desde el simple punto de vista anímico, puede tener consecuencias negativas; ya que la falta de sueño provoca fatiga, irritabilidad y agresividad; y es entonces cuando las perturbaciones psicológicas alcanzan sus más altas cotas. Además, conforme avanza el viaje hacia la noche, los personajes intensifican el consumo de alcohol (popular excitante del sistema nervioso) de manera desmesurada. Se dan, así, todos los elementos necesarios para alcanzar la crisis.


El largo viaje del día hacia la noche

Iraya Producciones

De Eugene O’Neill

Versión: Borja Ortiz de Gondra
Con Mario Gas, Vicky Peña, Alberto Iglesias, Juan Díaz y María Miguel
Dirección: Juan José Afonso
Escenografía y vestuario: Elisa Sanz
Iluminación: Juan Gómez-Cornejo Sánchez
Música: Luis Miguel Cobo
Vídeo: Eduardo Moreno
Ayudante de dirección: Laura Ortega

> Duración 2.30 h. (c/i)

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