Entrevista: José Antonio Martín Santos y José Manuel López Gaona. Imágenes. Galería Viñas
La Galería Alfredo Viñas nació en los epígonos de la Exposición Universal del 92. Inicio de la España de éxito, cemento y ladrillo.
A diferencia de esa España, grande y rutilante, él escogió un camino estrecho y un negocio pequeño y con valor. Su empresa dedicada al arte nunca fue un supermercado, ni él un vendedor de cuadros. Fue, es, un negocio dedicado a vender lo bueno, lo exclusivo, lo original. Centrada pronto en el autor fue fidelizando a sus artistas por el sencillo método de acercar la obra de ellos a los clientes, a los compradores.
La conversación que transcribimos, un fragmento de todo lo hablado, fue realizada a lo largo de tres horas en dos días diferentes. Una charla de amigos porque con Alfredo Viñas una conversación se transforma amistosa, fácil y de provecho. Una conversación con meandros, remansos, pero con mucho caudal.
Alfredo Viñas.
Yo he aprendido mucho de Juana Aizpuru, a través de mi relación y amistad con ella, con Soledad Lorenzo, con Elvira González, con Eva Benítez, con Carlos Taché, etc. El mundo del arte forma parte de mi familia, me lo he trabajado sencillamente porque (señala a una obra de Jesús Zurita colgada tras su silla) me interesaba que ese artista lo conociera Carlos Taché. Porque en mi proyecto de exposiciones conociera a ese y a ese otro. Me plantee acudir a ferias para darlos a conocer en el panorama del arte. Valencia, Sevilla, etc. Estrechar relaciones con los colegas, conocer a más artistas, a coleccionistas, directores de museos, los conozco a todos y con algunos he llegado a tener estrechas relaciones de amistad, con Manuel Bonet, con F. Huici, con Juan Bosco, Cereceda, M. Navarro. A muchos les he pedido textos para catálogos.
Porque quería que esos críticos reconocidos a nivel nacional reflexionaran sobre los artistas que yo tenía. Todo ese trabajo es para mí el de un profesional del mundo del arte que es a lo que yo he aspirado. Este es el concepto de galería que yo tengo, el que hay a nivel nacional. Nos hemos profesionalizado muchísimo. La galería es un espacio de trabajo, de atención al coleccionismo, de asesoramiento, de información de los artistas que tenemos, de todo.
De ahí he saltado a nivel internacional. Fui a Lisboa y conocí a galeristas portugueses como Suarez, María Siqueira, Cristina Guerra, Pedro Xera, porque a través de ellos he abierto una ventana de interés por el arte portugués.
Después fui a Turín, interesado por el arte en Italia. Todos los años voy a la feria de Basilea, que es la más importante del mundo y allí voy a pulsar las corrientes que hay en ese momento: que artistas plantean las grandes galerías, como la Gagosian, o que artistas plantean Mary Boom, Leo Castelli, etc. Así cuando puedo voy a Londres, Alemania, voy a la Documenta de Kassel con continuidad, a la Bienal de Venecia. Ese es mi trabajo de constante inversión personal, profesional, para tener una buena capacidad personal, para hacer un buen trabajo. Ni más ni menos. Eso me ha ayudado para evolucionar en mis conceptos del arte. Desde la primera exposición hace 20 años con Gabriel padilla, que se quedó en un artista local, y a mí los artistas locales dejaron de interesarme (o ellos se desinteresaron de mi). Me interesaba contextualizar los artistas españoles en el momento europeo, que estuvieran en el contexto de lo que se da en España y en el momento europeo en cada momento.
Aforo Libre.
¿De qué viven ahora las galerías de arte? ¿Quiénes son sus principales compradores, los coleccionistas, las instituciones?
Alfredo Viñas.
Los museos compran poco pero siguen comprando, los coleccionistas compran poco pero siguen comprando. Pues he tenido que reducir los gastos al reducir las ventas. He reducido los gatos en un 50 % porque he reducido las ventas. Pero el trabajo sigue siendo el mismo porque hay que seguir atendiendo a los clientes, a las instituciones. Pues siguen comprando pero muy poquito.
Aforo Libre.
20 años de galería. ¿Qué hitos ha habido para ti en estos 20 años?
Alfredo Viñas.
Yo no soy el más indicado para hablar de hitos. Que me juzguen los demás. Para mi cualquier exposición es un hito. Si puedo decirte que la galería ha evolucionado muchísimo, ha ido cumpliendo sus objetivos, teniendo presencia en ferias; nuestros artistas han tenido más visibilidad en el sistema del arte. Que la propia galería esté presente en el mundo del arte. Por ejemplo en el Consorcio. Es una manera de llamar la atención en los artistas que exponen en esta galería. Hitos hay muchos pero no voy a tirarme flores a mi mismo. Que me juzgue el público, el exterior, los críticos, los artistas, los profesionales de los museos. Que me juzguen ellos. Cada galería tiene un programa determinado que es lo que nos diferencia a unas de otras a pesar de estar muy próximas. Tengo mi estigma, mi criterio, mis conceptos estéticos que se ven a lo largo de las exposiciones, aunque a veces no queden muy visibles para los demás, para mi sí. De una a otra hay que ser muy observador para ver que hay un hilo conductor y como se van engrosando ese programa de exposiciones. Por Ej. Me interesaba a mí que los artistas locales estuvieran en un contexto con otros artistas del programa nacional más consagrado, de ahí que haya compaginado una programación de artistas muy consagrados con otros menos reconocidos. Para que entre todos hacer una tarea de equipo y se pudieran apoyar unos a otros, la prueba está que muchos artistas de la galería han entrado en algunas colectivas, propuestas que se han hecho en colecciones, museos, centros de arte. Etc. Eso es una tarea que forma parte de la estrategia que yo me he propuesto durante años para hacer visible la galería que en definitiva es hacer visible a los artistas.
Aforo Libre.
De los artistas de aquí cual es el que tu crees que hasta la fecha ha llegado más lejos
Alfredo Viñas.
Quizás Chema Lumbreras. Tengo que reconocer que he expuesto a otros artistas del entorno próximo que no han soportado la presión de trabajar para una galería, que eso es uno de los aspectos curiosos. Los artistas están acostumbrados a trabajar con galerías, pero con espacios institucionales, donde les hacen catálogos, donde hacen ventas solapadas, hacen una competencia desleal decimos nosotros, pero frente a eso no podemos hacer nada: muchas veces se autodescuelgan de la galería, simplemente no pueden seguir. No significa que sean malos o buenos. Simplemente no pueden seguir. Trabajar en una galería es uno de los escollos que encontré en Málaga cuando abrí la mía en los primeros años porque la gente no estaba acostumbrada a trabajar en galería. Anécdotas como abrirla y tener sentado al artista, preguntarle tu que haces aquí, porque no estás en el estudio trabajando, no es que es mi exposición, ya lo se pero la trabajo yo. Además la galería a lo largo del día, de la semana, del mes hay otros muchísimos encuentros, citas, tareas que no son exactamente la exposición. El artista aquí es un poco lastre. Pero eso es lo que se hace en la sala del ayuntamiento X, de la diputación, etc. Así el artista se entera de si va a vender un cuadro, etc. Algunos les gusta esa manera de trabajar y se autodescolgaban de la galería. No pasa nada.
Después se han dado cuenta de que el trabajo de la galería es muy profesional y necesario, se han intentado enganchar de nuevo, algunos si se han enganchado pero otros a lo mejor ya no me interesaban porque forma parte de lo mismo. Yo le pido mucho a los artistas, sobre todo cuando son gente joven, que lean mucho, que viajen. Que vean muchas exposiciones pues no se concibe un escritor que no lea, no se concibe un pintor que no vea pintura. Hay que ver constantemente pintura no para copiar, entrar en un mimetismo de lenguajes, sino sencillamente porque con la tensión creativa es como se evoluciona. Ese es mi empeño, estoy muy encima de ellos. Hay veces que el artista se acomoda, se queda en casa a ver la tele y se pone a pintar cuando viene la exposición y entonces la obra flaquea. A veces he tenido debates con los artistas y les he dicho esta obra no me interesa y no hacemos la exposición y eso ha causado un drama. Pero no puedo poner paños calientes, no puedo hacer algo de lo que no estoy convencido que es bueno, entonces con toda la dureza o con toda la ternura pero tomando decisiones drásticas he dicho: mira por donde esto va no me interesa, hemos abierto un período de reflexión. Otro año después ha vuelto y ha mejorado o está lo mismo o peor. Pues he dicho así no puedo seguir trabajando.
Aforo Libre.
No solo hay que sacar artistas hacia fuera sino traer de fuera. Aquí he visto artistas que me han gustado muchísimo y que para mi eran desconocidos. ¿Cuál es el artista de fuera que ha encajado más en los malagueños, que ha gustado más que ha vendido más?
Alfredo Viñas.
Una cosa es el mercado y otra cosa es el arte aunque ha veces estén próximas. (piensa unos instantes). Una galería la puede abrir cualquiera. El galerista debe dar confianza y credibilidad y con el tiempo convences a alguien para comprar. Ocurre que lo que se mete en el contenedor de la galería a veces se vende. Otras los artistas eran muy buenos y no se ha vendido nada o muy poco porque han hecho exposiciones muy arriesgadas; pero siempre hay que tener un equilibrio consciente de que Málaga es una ciudad con poca tradición de galerías y eso requiere construir un público, generando un mercado y siempre llevando un equilibrio. Y a subir el listón para que el público se familiarice con otros lenguajes.
Esa ha sido una tarea que no se si he conseguido pero que sigo haciendo. Entonces algunas se han vendido mucho y no por eso eran las mejores. Otras que se han vendido menos las considero buenas. ¿Dónde está el equilibrio? La última de Chema Madoz que era fantástica no se vendió nada. Era Madoz, reconocido a nivel nacional e internacional.
No siempre pensamos en vender. También pensamos en traer artistas que es necesario exponer.
Aforo Libre.
¿En Málaga de estos últimos años se ha desarrollado el coleccionismo? ¿Hay más coleccionistas?
Alfredo Viñas.
Creo que si. Antes había un coleccionismo disperso. Tengo una anécdota. Una vez en Arco me encuentro con un señor, amigo, que me dice:
® Alfredo ¿qué haces aquí?
® Pues aquí en la feria con mi stand. Y tú ¿qué haces aquí?
® Pues soy coleccionista desde hace muchos años.
Así que éramos amigos, de Málaga y cada uno ignoraba la actividad del otro. Todo estaba muy disperso.
Luego vino mi amigo y me ha comprado cosas.
Antes era todo distinto y ahora va todo muy acelerado. Antes iba a los todos los estudios de los pintores, gastaba la mañana y la galería cerrada. Después la cambié y pedía el dossier, si me interesaba quedaba con él una tarde en la galería. Ahora es todo on line. ¡Han cambiado tanto las herramientas de trabajo!
Aforo Libre.
¿Qué tipología de galerías hay en Málaga?
Alfredo Viñas.
En el 93 no había nada. Benedito estaba, era una galería señalada, convencional, académica.
Estaba solo ante el peligro. Ocho años después vino Javier Marín. Hace 5 o 6 años vino Isabel Hurley, La Casa Rosa. Con exposiciones de interés. Ahora hay un pequeño tejido. A pesar del estigma que tenía Málaga de que aquí las galerías duraban 2 o 3 años. Como Pizarro, Harras, etc. Se desinflaban porque no había mercado. Yo eso lo estudié porque efectivamente no había mercado y había que crearlo. Hoy afortunadamente lo hay. Pero todos nos repartimos los mismos compradores. Los compradores se hacen amigos de los clientes, de los galeristas. En resumen hay varias galerías en Málaga que tienen un programa bastante bueno.
Aforo Libre.
Un artista requiere en primera instancia una voluntad decidida de ser artista por encima de todo. Educar la mirada, estudiar, …
Alfredo Viñas.
Cuando más garantía un artista da es cuando está consensuado desde distintos frentes. Resulta que a mí me gusta. Resulta que sin saber nada ha ido a Sevilla y ha hablado con un crítico y le ha encantado. Ha hablado con el director de un centro de arte de Madrid y le ha llamado la atención y a partir de ahí uno empieza a creérselo. Hay una confluencia dispersa desde distintos frentes que apuestan por él. Efectivamente cuando personas, que llevan años dedicándose a estas tareas empiezan a ver valores, pues .. pero mientras tanto hay mucha morralla. Yo sí que animo a que la gente haga algo. Me gusta que la gente vaya con una cámara de fotos y que haga algo más allá de fotografiar a la novia. O que la gente pinte. Me gusta porque refleja un nivel de sensibilidad de un país.
Aforo Libre.
En este año que vas a hacer. Seguirás haciendo repaso de tus artistas.
Alfredo Viñas.
Repaso pero no continuado sino intermitente. Voy a poner algo nuevo y también un par de colectivas más. Más que nada para mostrar el agradecimiento a los artistas que durante años han confiado en la galería y como en la galería es pequeña y no caben todos. Quiero agradecerles, tener un gesto incorporándolos al programa de la galería.
Aforo Libre.
¿Qué piensas del cambio que ha hecho el Ayuntamiento al poner a Elías Nieto, director del Revello al frente del MUPAM?
Alfredo Viñas.
Teresa Sauret estaba ahí como resultado de un convenio entre Ayuntamiento y Universidad para ordenar la colección del patrimonio municipal, dado el currículo de Teresa con sus publicaciones de pinturas del XIX, su tesis doctoral y su voluntad. Ella mostró interés y la nombraron no como directora al uso sino como una responsable de ese convenio. El convenio ha expirado y el Ayuntamiento se ha visto en la tesitura de tener que nombrar alguien. Bueno este señor. Creo que hay algo práctico. Creo que el ayuntamiento no quiere verse en la obligación de contratar a alguien nuevo, la figura del asesor en las instituciones públicas está muy controvertida. ¿Asesores! Asesores que ha veces son necesarios. Un director del MUPAM es un asesor y tiene que tener un nombramiento propio.
Pues el ayuntamiento ha elegido a alguien de la casa. No se si cobrará lo mismo, le ampliarán o tal. Es una manera de evitar el riesgo. A mi me gustaría que hubiese sido otra historia, porque ese museo necesita otro aire, la colección está muy mal montada desde el principio.
Para empezar la sala de abajo es un espanto. Mejor que la quiten entera. No se pueden tener las esculturas en el hall, de cualquier manera. ¡Puestas en el suelo unas!. ¡En peanas otras!. Esculturas de todo tipo juntas. Una de Frank Rebajes, una de Pepe Seguiri, de Yesa mezclada con otra de Diego Santos. Todo un gazpacho. Y bueno, cuando vas subiendo las plantas... Hay que tener una lectura museográfica más moderna. No se puede tener un sentido lineal que ya no lo tiene ni el Prado.
El éxito de Zugaza en el Prado. Sabéis que Zugaza vino del Bellas Artes de Bilbao y es un museo modélico. Yo lo visité como Zugaza de director. Entrabas y..¡uf!. Cuando lo visité había un Tapies dialogando con una talla del románico. Eso es muy difícil conceptualmente. Hay que tener un alto nivel intelectual para hacerlo. Pero las salas encajaban perfectamente. Eran arriesgadas pero cumplían con cierta cronología. Era darle una categoría de arte universal. Eso hizo Zugaza.
En el Prado dada la complejidad del museo no lo ha hecho de manera tan abierta porque.. ¡quien contextualiza a Velázquez! ¡A Las Meninas! Pero sí la incorporación de algunos artistas contemporáneos como ciertos artistas del panorama abstracto internacional. Y esa línea es importante.
Volviendo al MUPAM eso se podría hacer, hacer un museo más ameno. Por ejemplo, recientemente se abrió en el puerto una exposición que se llama Eros en el Palmeral. Esa es la idea. La mujer, el desnudo, el erotismo en la historia de arte y coger un cuadro del XIX y mezclarlo con otro (moderno). Si se tiene una alto conocimiento intelectual, si tienes un conocimiento de la historia del arte bueno, te saldrá una exposición redonda y esa exposición de las nuevas museografías. Eso es hacer un museo vivo, no un espacio muerto llenos de señoras encopetadas.
Aforo Libre.
Bienal de Arte Contemporáneo.
Alfredo Viñas.
Aquí hizo una Bienal APLAMA, que fue una vergüenza, una cosa espantosa. Estuve en el jurado. Cuando pude me salí.
Yo no haría una bienal en Málaga. A Málaga le falta mucho que andar. Los grandes proyectos del arte tienen que tener un contexto, tiene que tener una ciudad muy potente. La tuvo Sevilla, que celebró tres o cuatro. Empezó muy bien, la primera, la segunda, pero… el problema es que son carísimas. Ya no se van a celebrar esta edición. Hay todavía trampas de la primera edición.
La primera bienal de Sevilla era de lujo, de auténtico lujo. Vinieron artistas de primera fila. Juan Muñoz, Edwin Wurm, Neo Rauch. Artistas que hoy en día están en primerísima línea mundial. Trajo novedades. Trajo a Neto, Canogar. Una bienal es costosísima.
Aforo Libre.
Quién paga una bienal.
Alfredo Viñas.
La Junta (pagó la de Sevilla). Pero también había un patronato de coleccionistas. No un patronato sino un ente público-privado. Costó muchísimo dinero y la Junta puso muchísimo dinero y también muchísimas empresas.
La Bienal en Málaga no tiene contexto. Málaga necesita todavía despegar. Málaga estaba muy bien hace cinco o seis años. La crisis ha estancado mucho Málaga. Son incapaces de poner dinero para el Auditorio. La ciudad tampoco acompaña. El tejido social.
Los políticos dicen que la cultura es un motor económico. El caso claro de este país es el Guggenheim. Pero es necesario un proyecto de ciudad. El Guggenheim se inaugura sobre la desaparición de la industria vasca. Pero es que hay un plan urbano, una nueva línea de metro... espléndida. La ría la rehabilitan y la ciudad hace así (señala ascenso). Efectivamente hoy todo son beneficios. La ciudad tenía antes un hotel de 5 estrellas, el Carlton y hoy tiene 14 o 15 de cuatro y cinco estrellas.
Aforo Libre.
El CAC en el Mercado de Mayoristas está bien, pero se está quedando pequeño aunque hace unas exposiciones magníficas.
Alfredo Viñas.
Cuando entras en el Guggenheim te quedas pasmado. Nada más que por el edificio ya de por si...
Yo hacía antes un centro de Arte de primerísima fila. Porque este nuestro hace encaje de bolillos. Hace las mejores exposiciones que hay en España. Pero el centro es así (señala con los dedos un espacio pequeño). Aquel (Bilbao) es una arquitectura de primerísima fila.
Aforo Libre.
¿Está comprando mucho el CAC?
Alfredo Viñas.
Bueno ten en cuenta que tiene dos millones y medio de euros al año para todo con lo cual poco puede hacer. Tiene un programa de exposiciones. También un programa de compras pero tiene 100.000 € al año. Poco dinero. El Museo Picasso tiene 12.000.000 € al año. Sorprendente. Pero al abrir el museo se les hizo un presupuesto blindado hasta el año 28. No se puede tocar porque está en los protocolos. Venga la crisis del 29. Eso está en los acuerdo con la familia Picasso. Un disparate todo. Con lo cual es un lujo, un oasis en la ciudad, con exposiciones, conferencias.
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