La última de nuestras entrevistas sondeando a personas del sector artístico malagueño sobre la situación de las artes escénicas en Málaga. En esta ocasión responden a nuestra entrevista Virginia Nolting, actríz y cantante, y Paco Bernal, dramaturgo, guionista y director.
Entrevista: Miguel Ángel Barba | Fotos: José Carlos Calderón Trillo (excep. Paco Bernal)
Virginia Nolting: Las nuevas fórmulas a las que últimamente se ha visto abocado el sector cultural, hacen que nuestras producciones las vendamos por tres duros y no demos el valor social y humano que se merece nuestra profesión, perdiendo la dignidad y cultivando precariedad. La situación es delicada y complicada, pero esto no es nuevo de hoy. Siempre se ha dicho que el teatro está en permanente crisis, y bueno, tal vez sea así, entiendo que, las crisis implican cambios, así que, prefiero darle la vuelta y pensar en positivo.
Paco Bernal: El teatro goza desde hace mucho tiempo de una mala salud de hierro. Quiero decir que, en mi opinión, la crisis es su estado crónico. Esto deviene de la competencia del cine y la televisión, además del generado por el ocio derivado de las nuevas tecnologías. El teatro ha quedado como una manifestación a medio camino entre la cultura y el ocio, a veces casi residual. ¿Cuánta gente tiene el hábito de acudir al teatro? A lo que hay que añadir la pesadilla de la situación económica que ha ahondado el problema cierto de descapitalización del sector. No hay inversión. La privada es mínima, la pública raquítica. A nivel local creo sin embargo que el hecho de poder acceder a un escenario de la dignidad y categoría como es el Teatro Echegaray es sin duda positivo. Las compañías malagueñas encuentran ahí un espacio perfecto donde mostrar sus trabajos. Pero el mundo escénico es mucho más que los estrenos de las compañías. Se necesita distribución y ahí, meollo del asunto, la cosa está muy difícil.
V.N.: Las políticas de turno, sin duda. Políticas estancadas en lo mismo de siempre. Las partidas presupuestarias atienden en un porcentaje elevadísimo a incentivar el turismo de la cuidad (Museos, Feria etc), mientras que al sector cultural se le hace un hueco, a mi modo de ver, bastante feo. Por no hablar del 21% de IVA que nos está haciendo polvo a todos. Que a mí me parece muy bien que se destinen todas ésas partidas, pero que no estaría de más que fueran más ecuánimes y más justas. No tenemos por qué conformarnos con las migajas. Y que en definitiva, construyeran una ciudad donde se nos tuviese en cuenta a todos.
Nuestra profesión, antigua como el mundo, ha servido para transmitir entusiasmo, ilusiones, conocimientos, sueños… pero sobre todo para cambiar y transformar algo en cada uno de nosotros y tenemos la responsabilidad de que eso, siga así.
¿Mejoras?, partidas para la creación, producción y exhibición Local, donde tengamos la oportunidad de poder ejercer nuestra profesión con dignidad, pudiendo cubrir nuestros seguros sociales y nuestro salario mínimo.
P.B.: No hay una causa es un conjunto: Descapitalización privada, falta de inversión pública, poca apuesta institucional por el teatro como arte, devaluación de las Artes Escénicas en la enseñanza, cierto toque elitista que le otorga al teatro la falta de circuitos populares de distrito/barrio y la consecuencia de esto que es que no se facilita la creación de un h-habito teatral, público que guste de la experiencia escénica, la carestía del precio de la entrada frente a su sobrentendido competidor directo que es la industria del cine...
La responsabilidad es compartida: instituciones, empresarios y trabajadores. El mundo escénico, los trabajadores de la escena tiene responsabilidad en cuanto que su obligación es la excelencia y esto a veces se olvida por un "como buenamente se pueda". Buenismo vs excelencia.
V.N.: Podría decir Azuloscurocasinego, pero me quedo con el Amarillo, de la luz, la fuerza y la unión. Actuar es el arte de transformar.
P.B.: Veo que vendrán tiempos mejores si primamos la excelencia. Si las insituciones hacen una apuesta clara por esta manifestación cultural. Y si los inversores privados ven una algún tipo rentabilidad como ocurre en el cine. Y conviene recordar en este punto que el teatro no es comercio, si bien también tiene algo de industria. Sin embargo estoy seguro de que en el peor de los casos, por mal que lo hagamos, no conseguiremos acabar con el teatro, que lleva miles de años resistiendo.
V.N.: Que ya era hora de crear una Plataforma hecha de personas. Es un movimiento muy joven, compuesto de veteranos y no tan veteranos del sector de las artes escénicas de nuestra ciudad, que trabajamos de una manera asamblearia y transparente. Con ganas de luchar y conseguir lo imposible si es menester. Dispuestos a crear la Unión del sector para trabajar con dignidad y libertad. Por eso creo en TEMA, porque ahora es nuestro momento, el tiempo de nuestra lucha.
P.B.: Todo intento de dignificación, organización, planificación y generación de estructuras de fomento de la cultura me parecen bien. En el caso concreto de Tema es un esfuerzo de defensa de la profesión y de la creación teatral que valoro y estimo, solo espero que no quede abortada por el fondo de individualismo y desconfianza que parece formar parte el carácter del teatrero, que finalmente no aflore el "qué hay de lo mío".
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