Teatro Cervantes, sábado 25/05/2013
Texto: Alfonso Urdiain Hermoso de Mendoza | Fotos web
Buen concierto de temporada en el que destacó la Impactante interpretación del concierto para violin y orquesta de Brahms.
Tras veinte largos minutos de las atonales Escenas de Pájaros del barcelonés Ramon Humet, empezó el concierto para la mayoría de los asistentes, quienes recibieron calurosamente -y con cierto alivio- a uno de los más grandes violinistas de la actualidad, el danes Nikolaj Znaider, para interpretar el primer y único concierto para violín y orquesta de Johannes Brahms.
El concierto presenta una extrema dificultad para el solista, tanto que incluso Joachim, virtuoso violinista que la estrenó, tuvo que pedir a Brahms una serie de modificaciones al superar la partitura los límites de lo tocable.
Como aliciente adicional -si fuera necesario- Znaider traía consigo el afamado violín denominado "Ex-Kreisler” construido por el luthier Guarneri del Gesu en 1741, y denominado así por haber sido tocado previamente por el legendario Fritz Kreisler.
Znaider demostró sobre el escenario su extraordinario dominio de la partitura -que grabó en 2.009 junto al director Gergiev- con un sonido muy trabajado -pulido- y una excelente técnica -limpia, precisa- que se vio acompañada de una contundente fuerza interpretativa, plena de lirismo pero sin sobrecarga dramática.
Extraordinaria cadenza (pasaje para solista) del primer movimiento, seguido por un sentido adagio -en el que también destacaron las maderas y un inspirado oboe-, para desembocar en un contundente final.
El público correspondió con prolongados aplausos hasta propiciar como bis de Nikolaj un inspirado tercer movimiento -Gavotte en Rondeau- de la partita nº 3 de Bach.
Tras el descanso, la Filarmónica dio lo mejor de si misma en la orgía de ritmo y color que es la Consagración de la Primavera de Igor Stravinsky, obra única, extraordinaria, en la que se condensan -sin precedentes- todos los elementos de la escritura musical, aportando unas armonías ásperas e impactantes, con una extraordinaria diversidad rítmica e inusual ensamblaje de timbres.
Muy acertada la batuta de Edmon Colomer en esta última obra de la velada, sabiendo extraer lo mejor de la orquesta, fantástica en todas sus secciones.
Aplausos y algún bravo huérfano de los espectadores, que ocuparon la mitad del patio de butacas el sábado, y eso que acudieron numerosos estudiantes del conservatorio “a precio de grupo” en una buena iniciativa a la que damos la bienvenida aunque pueda llegar algo tarde y con cierta improvisación.
Nº 13. 24 y 25 Mayo (viernes y sábado) 20.30 y 20.00 horas
Director: EDMON COLOMER
LA CONSAGRACIÓN
Escenas de pájaros R. HUMET
Concierto para violín y orquesta en Re Mayor, op.77 J. BRAHMS
La consagración de la primavera I. STRAVINSKY
Solista: NIKOLAJ ZNAIDER, violín