Sala María Cristina, sábado, 02/02/2013
Texto: Carlos Guerrero | fotos: Alfonso Urdiain
Buena música y escasa acogida. El violín de Corrado Bolsi dirigió a la OFM en el 4° concierto del II Ciclo los clásicos nunca duermen.
El cuarto encuentro del II Ciclo de los clásicos nunca duermen contó con la dirección al violín de Corrado Bolsi y una reducción de la OFM que prescindió de los vientos para la ocasión. El programa era sugerente y acabó siendo delicioso. Se abrió la noche con el sexteto de la poco visitada ópera Straussiana, Capriccio. El violinista italiano, pertrechado con su Guarneri de 1650, desplegó su talento para regalarnos una emocionante interpretación, llena de color y dinamismo, con un segundo violín y unos primeros viola y cello realmente acertados. La música fluyó con viveza, apasionada en los fortes, efervescente en los trémolos, y delicada y susurrante en los pianos con silencios atemperados y reposos exquisitos.
Para la suite de Don Juan de Gluck creció la formación sin perder por ello el sonido compacto ni la coordinación, salvo en algún momento en el solo de violín y clave durante el que se apreció algún desajuste. Nos adentrarnos en el barroco con la conocida Obertura en sol mayor para cuerdas y bajo continuo “Burlesque de Quichotte” de Telemann, que si por algo destacó no fue por su elección en los tiempos: una obertura que se nos antojó acelerada y carente de la solemnidad burlona requerida condenó a los movimientos rápidos a parecer abúlicos.
La segunda parte se abrió con una interpretación correcta del Concerto grosso en mi bemol mayor op.7 n°6 de Locatelli. Acto seguido, los Crisantemi de Puccini protagonizaron el momento álgido de la velada. Esta obra breve del compositor italiano fue escrita en el transcurso de una noche de la última década del siglo XIX en memoria del desaparecido Duque de Savoya. Esta elegía oscura y dolorosa sustentó su lamento en unos graves bien definidos que empastaron el sonido en una masa sobrecogedora ribeteada por el violín de Bolsi.
La Antiche arie e danze per liuto de Respighi cerró uno de los mejores conciertos que hasta el momento hemos presenciado en este ciclo. Excelente de nuevo la orquesta, y magnífico el morendo ejecutado por las violas al final del segundo movimiento.
Lamentamos desde aquí la pobre acogida que está teniendo este ciclo, que otra noche más no pudo completar ni la mitad del aforo. La elección de programas asequibles, el atractivo de algunas figuras del ámbito internacional y el inmejorable enclave no parecen ser reclamo suficiente para los aficionados malagueños. Esperemos que iniciativas como la lanzada por el Conservatorio Superior de Málaga por la que abarata la entrada de sus estudiantes en algunos auditorios de la ciudad se haga extensiva a este ciclo, y que, por ejemplo, si quien debe lo tiene a bien, se incluyan estos conciertos en el abono de temporada de la OFM.
CONCIERTO Nº 4
Día 02 de febrero 2013
Corrado Bolsi, director
Programa
Richard Strauss Sexteto de la ópera Capricho
Christoph Willibald Ritter von Gluck Don Juan (Suite)
Georg Philipp Telemann Obertura (Suite) en sol mayor para cuerdas y bajo continuo, TWV 55:G 10, “Burlesque de Quichotte”
Pietro Antonio Locatelli Concerto Grosso en mi bemol mayor op. 7 nº 6, “Il pianto de d'Arianna”
Giacomo Puccini Crisantemi
Ottorino Respighi Antiche arie e danze per liuto