Catedral de Málaga. 14/12/13
La Misa de Gloria de Giacomo Puccini protagonizó el Concierto Extraordinario de Navidad de la Orquesta Filarmónica de Málaga y el Coro de Ópera de Málaga en la Catedral.
Texto: Françoise Chabassier | Fotos: Federico Martínez Alés
El sábado 14 de diciembre, la Misa de Gloria de Giacomo Puccini dio vida y calor a los esplendidos y fríos mármoles de la Catedral de Málaga. Para la ocasión, la Orquesta Filarmónica de Málaga, bajo la batuta de Diego Gómez Ávila y el Coro de Ópera de Málaga, contó con dos maravillosas voces de nivel internacional, el tenor canario Manuel Gómez Ruiz y el barítono alemán Thomas Stimmel. Era la primera vez que 'Misa de Gloria se escuchaba integralmente en la Catedral donde no cabía ni un alfiler.
El autor italiano de Tosca, La Bohème…, fue un visionario. Añadió conceptos armónicos y compositivos que regirán la música descriptiva durante el siglo XX. Puccini está considerado uno de los grandes músicos de finales del siglo XIX y principios del XX.
Cuando Puccini compuso la Messa a 4 voci con orchestra, más conocida por su nombre apócrifo de Misa de Gloria, era una misa para solistas, cuatro voces y orquesta. Se estrenó en Lucca en 1880.
Es una obra de juventud y anterior a su carrera operística en la que incorporó un “Motete” y un “Credo” compuestos dos años antes. Esta composición, tenía una doble finalidad. Por un lado se destinó a la conmemoración sacra de San Paulino, patrono de la ciudad de Lucca, y por el otro, Puccini la presentó en el examen final del Instituto Musicali de Pacini. En ella se combinan rasgos de la polifonía tardo-renacentista y barroca, con elementos líricos.
A pesar de que Puccini dedicara su carrera a la composición de grandes óperas y tenía una faceta bastante teatral como se ve reflejada en Misa de Gloria, no se olvidó de ésta e integró en su ópera Edgar, el Kyrie y en Manon Lescaut, el Agnus Dei.
Debajo de la majestuosa bóveda nervada de la Catedral, vibraban las voces solistas, la del tenor Manuel Gómez Ruiz en el Gratias y Et incarnatus, la del barítono Thomas Stimmel en Crucifixus y Benedictus y ambos en el Agnus Dei, se podría decir que algunos coros se asemejaban a la ópera, en cambio, Kyrie sonaba como una sencilla oración y Cum Sancto Spirito,Et vitam revelaban una gran religiosidad.
Para poner en valor el patrimonio artístico de la Catedral, cada año se realiza un cartel del concierto reproduciendo una obra de arte que se encuentra en ella. Este año, se trata del motivo central de un tríptico representando la Anunciación y pintado por el italiano César Arbassía (1550-1607).
Tanto la Orquesta Filarmónica de Málaga como el Coro de Ópera rozaban lo divino, lo grandioso, lo mágico. El público no paraba de aplaudir este sublime concierto navideño que tenía un escenario excepcional.