17/03/2016. Teatro Cervantes.
Texto: Carlos Guerrero | Fotos: Daniel Pérez / TC
Juan Perro deja su Huella Sonora entre el público malagueño con un canto al mestizaje musical.
A veces ocurre que el escenario se llena con poca gente. Artistas mayúsculos que se desenvuelven entre las tablas como quien anda por el salón de casa. A esta especie pertenece esta jauría.
La personalidad de Santiago Auserón es tan compleja como variadas sus propuestas musicales. En trío, Juan Perro −cantor, poeta y estudioso musical−, une todas sus facetas para ofrecernos un espectáculo íntimo y mestizo, fruto de un estilo nacido en la movida madrileña y madurado en sus viajes a Cuba y Norteamérica.
Bendecido por las musas del son y la negrura, bautizado con ron en el Misisipi, Juan Perro llena un hueco en la música de autor española con un sello propio. Acompañado en esta ocasión por la Gibson de Joan Vinyals y el saxo y el clarinete de Gabriel Amargant, su voz retumba firme por las esquinas del teatro. A cada canción le precede el relato de su gestación, despertando la carcajada con su locuaz ironía, la perplejidad por la inverosimilitud o la congoja por la belleza del discurso. Así, más de una veintena de temas en casi dos horas y media de concierto, algunos ya escuchados y otros nuevos que se registran pronto en el corazón del escuchante, el más preciado de los formatos, en palabras del cantor.
A los arreglos sopesados le suceden las improvisaciones en Río negro, Señora del mar, En la frontera, Obstinado en mi error, Pies en el barro o Ámbar. Mediado el concierto, se entrecorta la respiración con los acordes de No más lágrimas, mientras el cantante deja su asiento para desgranar a capela desde el proscenio los versos dolientes de una ruptura irreversible. Con el público en pie, crece la comunión con el artista. Antes de cerrar con Perro flaco, Semilla negra y Reina Zulú, suenan nuevas melodías: Nada y las dedicadas a Marilyn en Los inadaptados. Concierto franco para recordar por su calidad artística y sonora. Y es que pasan los años para todos, pero no a todos les sienta tan bien como a Santiago, cada vez más Juan, cada vez más Perro.
Voz y guitarra: Santiago Auserón
Guitarra eléctrica, armónica y coros: Joan Vinyals
Saxo y clarinete: Gabriel Amargant