11/07/2021. Teatro Cervantes. Terral 2021
Texto y Fotos: Lui G. Marín
Esa gestualidad y expresividad corporal con la que atrapa cada nota y la impulsa al público, hace que su inmensa voz llena de matices y quiebros, llegue hasta el más recóndito de nuestros sentimientos.
Ella misma es toda emoción, la emoción que impregna el fado, toda una seña de identidad de Portugal. Y el fado en su máxima expresión sonó esa noche, teniendo como hilo conductor a Amália Rodrigues, la reina de este género que Mariza homenajeó en su concierto, de hecho presentaba su último disco llamado Mariza canta Amália (2020), un disco en el que rinde tributo a la diva del fado, a la vez que celebra los 20 años de carrera.
Pero el repertorio de Mariza no solo es fado, la primera parte del concierto nos trajo otros ritmos de R&B o Bossa Nova, a la vez que nos recordó su participación en la película de Carlos Saura, Fados donde colabora con Miguel Poveda con la canción Meu Fado Meu.
Nos hizo participe de la musicalización de sus propios textos, una manera más de desnudarse, mostrándonos sus sentimientos, como ella misma nos contó.
En todo momento estableció una conexión con el público, hasta el punto de dejarnos a nuestra elección, hacia el final del concierto, el siguiente tema que interpretaría. Siendo uno de los bises su colaboración con el cantaor José Mercé, Hay una música del pueblo.
Sin duda Mariza ha extendido muchos vínculos con otras músicas de la península ibérica que también desbordan sentimiento, como el flamenco.
Algo que quisiera destacar del concierto, es la elegancia, exactitud, sobriedad, y ante todo una ausencia de exceso de virtuosismo. En este caso era innecesario, ya que ya de por sí, la calidad de la música, y la voz e interpretación de cada uno de los temas estaban repletos de una virtuosidad innegable.
Esa pulcritud y precisión son incrementados por la formación musical que acompaña a Mariza en esta gira: Cuerdas, percusión y acordeón vibraban armónicamente acompasados al sentimiento de la voz de la cantante. Vibraban armónicamente con el corazón de un público entregado, que no olvidará las dos horas de concierto que nos ofrecieron.
Mariza: Voz.
Luis Guerreiro: Guitarra portuguesa.
Phelipe Ferreira: Guitarra.
Adriano Alves: Bajo.
Joao Freitas: Percusión.
Joao Frade: Acordeón.