14/12/2019 Teatro del Carmen. XLII Festival Juan Breva de Vélez-Málaga.
Texto: Manuel Malaka l Fotos: Mike Burns
Este pasado sábado se celebró un año más el festival Juan Breva en Vélez-Málaga. Con más de cuatro décadas, es uno de los festivales flamencos más antiguos de Andalucía. Y estuvimos allí para disfrutar de lo que prometía ser, y fue, una noche inolvidable.
Uno de los primeros atractivos que tiene el festival es acercarnos al Teatro del Carmen, su ubicación. Supuso la transformación de un antiguo Convento Carmelita en un teatro moderno, que no solo respeta la arquitectura de su entorno, añade valor a ese paisaje urbano, en el mismo corazón de la ciudad.
Hay que felicitar a la organización del festival por varios motivos. En primer lugar por saber ofrecer flamenco de primer nivel a precios populares. Lo que hace que los teatros, como en esta ocasión, se llenen, y eso siempre es motivo de alegría. En segundo lugar por dignificar la memoria de artistas como Juan Breva que son historia de Málaga y de nuestra cultura. Y también, y muy importante, por servir de trampolín para lo mejor de nuestra cantera.
Esta joven promesa de Totalán, Fabiola Santiago, estuvo representando a esa estupenda cantera que posee la Axarquía, y fue la encargada de abrir la noche. Una jovencísima cantaora, sobrada de facultades que estuvo acompañada por uno de nuestros guitarristas más solicitados, Francisco Vinuesa. Natural de Frigiliana, Francisco es ya una figura consagrada en los escenarios, y junto a Fabiola nos demostró por qué se ha convertido ya en uno de los grandes de la guitarra flamenca.
En segundo lugar subió al escenario del Teatro del Carmen la bailaora sevillana Pastora Galván, hermana de Israel Galván. Su puesta en escena estuvo cargada de pasión, quizás en exceso. Pero se supo acompañar, y nos permitió disfrutar de dos de las mejores voces para el baile: el jerezano Miguel Lavi y David el Galli, de Morón de la Frontera, que hicieron romper en aplausos al público en varias ocasiones. Y a la guitarra, nuestro Juan Requena, con la solvencia y la maestría que le caracteriza. ¡Vaya trío de ases!
Y por fín subió al escenario Rancapino Chico, al que todos esperábamos. Lleva cantando desde la más tierna infancia, como no podía ser de otro modo siendo hijo de quien es. Y hoy día es cabeza de cartel de los mejores festivales flamencos. A principios de este año presentaba su primer disco grabado en directo, Por mi amor al arte. Si Federico dijo de Juan Breva:
Su voz tenía / algo de mar sin luz / y naranja exprimida.
De Rancapino Chico solo podemos decir que su voz posee los aromas del mejor moscatel de la Axarquía. Oro viejo, limpio y brillante, con aromas a frutas maduras, miel y romero,… Así sabe el cante de Rancapino Chico. Una voz flamenquísima que embriaga los sentidos. Sabiendo mimar la pureza de su cante, como su padre, pero sin caer en lo rancio.
Poco se puede añadir más a lo que todos ya han dicho del cantaor de Chiclana. Alonso Núñez Fernández (Rancapino Chico), hijo del gran Rancapino. Con poco más de treinta años, promete ser, sin lugar a dudas, uno de esos cantaores que, como Juan Breva, marcan una época y quedan para la historia.
Esperemos que cada año este festival siga creciendo en calidad, afición,... y demostrando que la Axarquía ha sido, es y será cuna de grandes artistas, y tierra de buen moscatel y mejor flamenco.