Terral. Festival de verano 2012. Teatro Cervantes. 08/07/2012
Texto: José Manuel López Mira | Fotos: Daniel Pérez / TC
Hija menor de la actriz Malagueña Marisol y del desaparecido bailarín Antonio Gades presentó su segundo disco “En una calle blanca”, producido y dirigido por Curro Carrasco de Navajita Plateá y grabado en Muralla Records (Jerez de la Frontera).
En este segundo trabajo se puede disfrutar de temas más íntimos que en su primer disco, más orientado al flamenco pop con toques muy rítmicos.
Este segundo disco puede describirse como un flamenco con una gran orientación hacia la fusión, con ciertos rasgos modernos y contemporáneos, pero sin olvidar sus raíces flamencas, su esencia, ni su voz tan característica.
Entre los temas más destacados a lo largo del concierto, destacar “En una calle blanca” dedicada a su hijo curro, “Alfarero” o “Lucharé”.
Clasificado dentro del antedicho flamenco fusión o nuevo flamenco, se observa un importante uso de instrumentos, que hasta hace algunos años no eran tan usuales en el flamenco pero que hoy día, absolutamente integrados y habituales, dan esa variedad armónica y de sonoridad: guitarra eléctrica, piano, violoncello, escoltados por los habituales palmeros acompañantes, la guitarra española o la percusión, todo ello dota de una variedad musical, de cadencias, que hace difícil poder encasillar su estilo exclusivamente en el flamenco.
El tratamiento dado a las canciones es de una gran vitalidad y profundo sentimiento, siempre dejando relucir la parte más intima de la artista. Celia Flores no se conformó con presentar su segundo disco, también deleitó con temas de su antiguo trabajo llamado como ella “Celia Flores”, como la archiconocida “No me lo creo” o “Tangos de la lluvia”.
Durante la actuación hubo algunas sorpresas, como la sorprendente interpretación que la artista malagueña hizo de la canción “Si nada tengo”, acompañada solamente del piano del magnifico Tony Romero. Al final de la actuación se pudo disfrutar de canciones como “Un consejo”, a la que el público acompañó en pie, coreando y cantando.
Celia es una artista que le canta al amor, a la pasión y al hombre de sus sueños, con canciones muy íntimas. Ha heredado la vena artística de sus padres pero, sobre todo, el espíritu de su padre con esas raíces flamencas unidas a un estilo propio que poco a poco le está dando resultado.
En una calle blanca
Celia Flores voz
Tony Romero piano
Batio Hangonyi violonchelo
Curro Carrasco y Fernandito de la Morena guitarras
Manuel Luca bateria
Juan Grande percusión
Manuel de la Curra y Noemi Humanes coros y palmas