14/07/2016. Festival Terral. Castillo de Gibralfaro.
Texto: Manuel Malaka | Fotos: Paco Lobato (firmadas) y Manuel Malaka
Posiblemente sea una de las citas más agradables con el flamenco en nuestra ciudad. Las noches flamencas en el Castillo de Gibralfaro de cada verano. Este año han tenido lugar dentro de la programación del Festival Terral.
Por desgracia y como viene siendo norma desde hace mucho en nuestra ciudad, la programación sin duda podría haber sido más rica de lo que ha sido (solo dos noches). Si se ampliara el número de espectáculos permitiría también la presencia de artistas locales. Málaga cuenta con grandes nombres en el flamenco.
Otro aspecto a revisar, en mi humilde opinión, sería el de la entrada única. Si muchos de nosotros nos aficionamos al teatro o al flamenco, fue porque cuando éramos estudiantes encontrabamos entradas para todos los bolsillos. Aunque suponga ver las actuaciones en la última fila. Es un gesto que demuestra que la cultura que queremos en nuestra ciudad no es excluyente por razones económicas. Y es posible que de este modo los espectáculos resultaran incluso más rentables.
“Las noches del castillo” que así se llamó el año pasado, y que se incluyó dentro de la programación de la IV Bienal de Flamenco, debería consolidarse como una programación propia. Hacerla crecer en número de espectáculos y consolidarla para que no se ofrezca como un comodín para completar otras programaciones, en el caso de este año la del Terral.
David Lagos llega a Gibralfaro el jueves 14, después de que Esperanza Fernández ocupara el escenario la noche anterior. David ganó la lámpara minera en 2014, consolidando así una larga carrera en el flamenco en la que hay que señalar entre otras, su colaboraciones con Israel Galván, Cristina Hoyos, Pilar Távora o Eva Yerbabuena. El jerezano cuenta también con dos discos en el mercado: El espejo en que me miro de 2009, y Mi retoque al cante jerezano.
Estuvo acompañado a la guitarra sobre el escenario de Gibralfaro por su hermano. Alfredo Lagos que desde hace tiempo se ha ganado un lugar propio entre los guitarristas flamencos. Como David, él también ha compartido escenario y ha colaborado con los grandes nombres como Morente, Arcángel, Mercé, Poveda o Rocío Márquez. Y su disco como solista Punto de fuga lo ha situado entre los guitarristas más interesantes del panorama actual.
David comenzó la noche con una granaína en la que ya nos dejaba ver que es un cantaor sobrado de facultades. Su caudal de voz inundó el castillo de buen flamenco, hecho con respeto, con solvencia y con saber. Como no podía ser de otro modo, estando aún tan reciente, tuvo unas palabras para el recuerdo de Juan Peña El Lebrijano, al que dedicó una soleá. Poco después nos sorprendió haciendo unos cantes de Cádiz sin acompañamiento, demostrando que el compás no tiene ningún secreto para este jerezano.
Su amplio y variado repertorio es un homenaje al flamenco con mayúsculas. Nos ofreció un paseo por diferentes cantes recogidos en sus dos discos, donde Jerez, como es lógico, tuvo un protagonismo especial. La noche también nos permitió disfrutar de la guitarra en solitario de Alfredo interpretando uno de sus temas.
El público despidió a estos dos hermanos en pie y emocionado tras unas bulerías de pellizco, agradeciendo con un largo aplauso una noche inolvidable de flamenco en la que el de Jerez nos deleitó a todos con un flamenco que duele y que sana, un flamenco que traspasa porque está hecho con verdad.
David Lagos cante
Alfredo Lagos guitarra
duración 1.20 h. (s/i)