27/07/2014. Teatro Cervantes. Festival Terral 2014.
Texto: Alberto Medina López | Fotos: Daniel Pérez / TC
Una canción.
Un recuerdo.
Un sentimiento.
Al variopinto Festival Terral llega la cantante catalana Mayte Martin. Sin una voz más alta que otra, sin estridencias, y con su humildad habitual, Mayte Martin llenó el escenario del Cervantes. Con muchos menos decibelios, desde el minuto uno, el cante de Mayte colapsó un casi abarrotado teatro. Por los muertos del cante es el nombre de su nuevo espectáculo, con temas conocidos (otros no tanto), en el que nos introduce en la memoria sentimental del flamenco alejándose de su particular registro de bolerista.
Tras Los Campanilleros de La Niña de la Puebla, Mayte nos presenta un concierto íntimo, de aquellos cantaores que más han influido en su carrera. Posteriormente una zambra de Carmen Amaya, petenera mexicana y unos tientos y tangos en honor de La Repompa y otros cantaores que han quedado en la memoria colectiva. El diálogo es constante con el público, y tras descubrir su gran veneración a Juan Valderrama, como cantaor y persona, interpreta una guajira, Mi mulata. Ya casi en el ecuador, bulerías de Jerez, de Manolito de María, Concha Piquer (Romance de la Reina Mercedes) y Antonio Machín (Un Compromiso).
La simbiosis con los músicos en constante (José Luis Montón y Juan Ramón Caro en las guitarras y Chico Fargas en las percusiones). Para finalizar, un homenaje a un género minusvalorado y tachado de folclórico, una suerte de seguidillas: hablamos de las sevillanas. Interpreta varios movimientos compuestos por el maestro Manuel Pareja Obregón como La puerta de Toledo o Que también es de Sevilla.
Tras una fuerte ovación, un esperado bis, una canción conmovedora y ya clásica en su repertorio: SOS. Termina una noche llena de “trozos de vivencias y momentos sagrados, melodías que transportan a momentos felices”.
Mayte Martín, voz
José Luis Montón, guitarra
Juan Ramón Caro, guitarra
Chico Fargas, percusiones