Sala La Cochera Cabaret. 27/04/2013
Texto y fotos: José M. Cortés
Usualmente dejo sin comentar o lo hago vagamente lo que me han parecido los teloneros del grupo principal, pero lo cierto es que esta vez me han sorprendido.
Este conjunto de pop fusión con algunas influencias tribales salieron al escenario con una puesta en escena bastante oscura y con reminiscencias de las noches a la luz del fuego en algún lugar centroafricano donde aún no ha llegado la Coca-Cola. Tal vez demasiado arriesgado para la noche que iban antes de Lito.
Lo normal es que los teloneros sean unos músicos en los que te pasas más tiempo pensando cuando acabarán que en oír lo que están haciendo. Bien es cierto, que suele ser más por inexperiencia que por otra cosa esa falta de interés. En el caso de este concierto tuvimos tiempo para todo puesto que estuvieron sobre las tablas una hora. Al principio ya comentaba que la propuesta era algo atrevida para empezar, pero la evolución hacia un estilo pop más asequible aligeró bastante el momento. Unas instrumentaciones bien elaboradas con unas líneas de bajo de lo más interesantes con guitarras más rítmicas que otra cosa y con acompañamientos de percusión inagotable.
A los micros, dos voces, una masculina y otra femenina, con la del chico más presente. Una voz suave que puede recordar a la de Javier Ojeda, más por el timbre que por la forma de cantar. La femenina de acompañamiento, bastante chillona pero no desagradable por encajar perfectamente con el estilo del grupo. Un grupo al que seguirle la pista.
La pregunta que me rondaba la cabeza al salir del concierto era ¿y yo qué cuento ahora de esta gente?, después de haberlos visto dos veces, uno con el homenaje a Etta James y otra en la Cambayá Blues Reunión.
Pues de entrada eché en falta a Phil Wilkinson, teclista de la banda y que en otras ocasiones refuerza el sonido y lo hace más brillante y complejo. Además la primera canción tampoco estaba Suzette, pero Lito, Jorge y Nico funcionaron en el calentamiento perfectamente a modo de power trio. La hora de comienzo del concierto era un handicap porque entre el retraso en empezar Solo un momento, la duración de su actuación y los ajustes técnicos hiciero que salieran a la 1:00. Pero el sueño cayó rendido ante la evidencia cuando salió la cantante y calentó la voz. El repertorio, el habitual y más que dominado por la banda... Sweet home Chicago, un par de temas de Etta James, Crossroads, I'm so blue etc.
Como sorpresa, ver la evolución positiva de Jorge al bajo respecto a otros conciertos; aquí se atrevió con compases más complejos de estilo funky y con algún que otro solo que en otras ocasiones se habían echado en falta. La intro de Hootchie coochie man fue su momento estelar del concierto a mi juicio con una adaptación de la intro que recordaba, quizá a Higher ground de Stevie Wonder.
Lito, estratosférico, sobre todo en un momento de especial alarde técnico cuando simulaba montar en un toro mecánico al tocar un solo.
Nico, como siempre con una pegada dura, demuestra un dominio total del repertorio, así como una comunicación no verbal con Lito que hacen natural cualquier movimiento ensayado sin que se noten señales entre ambos.
Por último Suzette, esta propietaria de una voz espectacular, estuvo como es costumbre técnicamente muy bien. Sin embargo se advirtió cierta frialdad en la interpretación, lo que hace que se le echara en falta algo más de comunicación con el público.
Además de lo mencionado recalcar las interpretaciones de A day in a life (Beatles) y Before you accuse me