Espectacular, vibrante… OBK vuelve a demostrar después de sus veinte años de carrera, colmados de éxitos, que su música sigue creciendo y conquistando el corazón de todas aquellas personas que les siguen a través de sus conciertos o escuchando su música.
Texto y fotos: Raquel Marfil Gómez y Adrián Martí Villatoro
Sala La Trinchera. 09/11/2013.El pasado día 9 de noviembre esto se hizo evidente solo viendo cómo el numeroso público que asistió a la Sala Trinchera cantaba y bailaba sus canciones… ¿Qué podemos decir de este grupo que no se sepa ya? Jordi Sánchez sigue teniendo esa peculiar voz que, cuanto más la escuchas, más te enamoras.
Jordi demostró ser una persona abierta, agradable, que interactúa mucho con el público. Se dejó ver en numerosas canciones que interpretó: De qué me sirve llorar, Falsa moral, Tú sigue así, La princesa de mis sueños, así como otras de sus numerosos discos.
El público quedó encantado con su forma de interpretar sus canciones, ver con qué fuerza y sentimiento esas canciones cobraban vida propia. A medida que el concierto se desarrollaba, intercalaban temas de sus antiguos discos con canciones totalmente nuevas, como, por ejemplo, Revolución.
Sus dos acompañantes instrumentales, Mario Cea y Sergi Pérez, acompañaron la voz de Jordi de una manera sublime.
Por un lado, Mario hizo una interpretación magistral con la guitarra (tanto la guitarra eléctrica como la española). En nuestra opinión, observar sus movimientos a la vez que tocaba la guitarra es algo que nos dejó sorprendidos… Además de esa actitud cañera y rompedora que, con esos acordes, hacía retumbar toda la sala.
Y, por el otro lado, el pianista Sergi Pérez, tocó con gran maestría y sentimiento todas las canciones que se interpretaron esa noche, por qué no decirlo, tan mágica. Hay que poseer una gran habilidad para tocar como él lo hizo esa noche.
Así mismo, Jordi, Mario y Sergi, agradecieron de corazón el apoyo que han recibido y están recibiendo a lo largo de su carrera musical. Jordi cantaba en su tierra, Málaga, acompañado de su familia, donde demostró ser un malagueño de los pies a la cabeza. También Jordi quiso agradecer el gran trabajo del manager del grupo.
Para finalizar, tenemos que destacar la gran colaboración de todos aquellos trabajadores de la Sala Trinchera, que, tanto desde el momento de acceso al recinto como una vez dentro, demostraron su gran profesionalidad. Desde aquí recomendamos que visiten la Sala La Trinchera.
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