XVIII Festival de Cine Francés de Málaga. Cine Albeniz. 19/10/2012
Texto: Paco Bernal | Fotos: Organización
El filme “Tout ce qui brille” (“Todo lo que brilla”) abrió el viernes pasado el 18 Festival de Cine Francés De Málaga.
La película es la primera obra de la actriz, guionista y directora francesa Geraldine Nakache.
Un largometraje estrenado en Francia en el 2010 por el que fue nominada como Mejor Ópera Prima en los César 2011 y que previsiblemente no llegue nunca a las pantallas comerciales españolas, al menos con copias suficientes para ser (re)conocida. Y es una lástima porque se trata de una encantadora historia de amistad y ansias de escapada.
Lila y Ely, dos chicas de una localidad ciudad dormitorio de Paris viven desde su infancia una amistad de confidencias y sueños. Ambas anhelan escapar de la mediocridad en la que se sienten sumidas, la cotidianidad de una vida corriente. París les ofrece esa oportunidad con su oferta de placeres y diversión, les atrae como polillas hacia la luz. Encantadas por el oropel de la ciudad cosmopolita y festiva salen por las noches buscando diversión en el ambiente del pijerío. Conocen “amistades” nuevas y por integrarse en ese círculo tejen una red mentiras que acaba envolviéndolas.
Como buena tragicomedia en el transcurso de la película encontramos momentos hilarantes y momentos de profunda emoción. El que esto escribe a veces reía y a veces se emocionaba con la peripecia de las protagonistas, quienes son el eje absoluto.
La película tiene un cierto tono egotista. Aprehendemos el mundo a través de los ojos de Lila y Ely. No existe nada al margen de ellas. En todas las escenas están ambas o al menos una de ellas y únicamente sabemos lo que ellas saben o creen saber.
Para el espectador el resto de personajes son sombras –unas brillantes otras opacas- que orbitan en torno a las dos chicas. Efecto curioso pues argumentalmente son ellas quienes orbitan el pijerío. Sombras sí, pero llenas de humanidad, no son fútiles, sino que esos personajes secundarios gozan un hálito de extrañeza y singularidad reflejada en apenas un esbozo. Como si fuera mucho lo callan y guardan dentro. Personajes que esconden mucha vida: la madre de Lila, el padre de Ely, la nueva “amiga” Agatha, la amiga de toda la vida, Carole,…- personaje magníficamente construido por Audrey Lamy y por el que fue nominada en los César 2011 al premio a la Actriz Revelación, premio que finalmente recayó en su compañera de reparto en esta película y protagonista junto con Geraldine Nakache, Leila Bekhti-.
“Tout ce qui brille” refleja una juventud que ansía escapar de su ambiente cotidiano que sienten vulgar, quizá embaucada por lo que les venden los anuncios de colonia y de moda. Una juventud que ambiciona cambiar su puesto de trabajo como vendedores de palomitas o bocadillos por otro vendiendo zapatos de Gucci, que quiere cambiar su ciudad dormitorio por un barrio de París, su vida – que viven como gris- por cualquier otra con lujo y a technicolor, que se siente harta de estar siempre a diez minutos de todo