16 Festival de Málaga. Cine Español. Sección oficial largometrajes. 24/04/2013.
Un río de sangre metáfora de un MéxicoTexto: Paco Bernal | Fotos: Dossier de prensa
En 1994 en México el candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio, fue asesinado tras un mitin en Tijuana. La versión oficial señaló únicamente la participación de Mario Aburto en el homicidio mientras que distintas versiones paralelas apuntaron a la existencia de una conspiración de estado que alcanzaba incluso al Estado Mayor de Carlos Salinas, a la sazón presidente mexicano.
Colosio: El Asesinato es un thriller político y valiente, un compromiso del director Carlos Bolado con la verdad en un episodio luctuoso de su país. Uno no puede sino comparar esta gran película con la prolija, relamida y a ratos entretenida JFK para comprender que Colosio es buen cine puro y duro. JFK a Colosio es lo que un tomate de Mercadona a otro de una huerta ecológica de la vega de Antequera. Donde de un lado hay forma en el otro hay sabor.
La película incluye una y otra vez escenas reales del atentado, ciertos nombres e identidades se mantienen, los escenarios son los que fueron…
Pero no cae en el documentalismo ni reporterismo, tiene una cuidada ambientación, diversas texturas de fotografía, gran interpretación, dirección con pulso, sabio ritmo narrativo, un guión que conjuga bien los diversos elementos de la trama: lo político, lo periodístico, la historia familiar, lo detectivesco, la violencia… Es un filme que hubiera firmado gustoso el Costa-Gavras de Z. Es la denuncia de una corrupción de estado y un estado de corrupción.
Estamos ante una destacada película que fue el filme más taquillero en México del 2012, en los Ariel (los Goya mexicanos) se premió a Carlos Bolado como el Mejor Director y a Daniel Giménez Cacho como Mejor Actor (un Cacho impagable en su rol de El Doctor: “La gente creerá lo que tengan que creer”).
Durante los últimos minutos de metraje, Colosio: El Asesinato, cierra su círculo de violencia, aprieta el gatillo que abre la puerta de la impunidad. Y ya en el postrero instante nos regala un último plano, un cadáver envuelto en plástico, arrojado a un riachuelo que se tiñe de sangre en la corriente agua sucia. México con esa imagen se desangraba en la retina de los espectadores.
Véanla, pendejos. No me sean guajes.
Dirección: Carlos Bolado
Acrores: José María Yazpik, Daniel Giménez Cacho, Kate del Castillo, Odiseo Bichir, Luis Ernesto Franco, Tenoch Huerta, Marco Pérez, Harold Torres, Karina Gidi
Guión Hugo Rodríguez y Carlos Bolado, con la colaboración de Miguel Necoechea
Música Original Pascual Reyes
Supervisor Musical Herminio Gutiérrez
Sonido Directo Santiago Núñez
Diseño de Sonido Matías Barberis y Nerio Barberis
Producción ejecutiva Mónica Lozano y Javier Salgado
Producción Mónica Lozano y Hugo Rodríguez
Coproductores Antonio Chavarrías, Emilio Maillé y Gustavo Ángel
Fotografía Andrés León Becker
Diseño de Producción Sandra Cabriada
Diseño de Vestuario Gilda Navarro
Montaje y Edición Luciana Jauffred, Francisco X. Rivera y Carlos Bolado
Efectos Visuales Gabriel Kerlegand
| Sin eventos |
