13/12/2014. Espacio B. Teatro Cánovas.
Texto: Andrea Acquaroli | Fotos: Miguel Ángel Barba
La compañía de Teatro Línea 6, lleva una larga lista de funciones presentando en el Teatro Cánovas su espectáculo Cheshire Teatro para bebés, con localidades agotadas.
Los verdaderos protagonistas, realmente, son los bebés espectadores, los cuales van entrando en un mundo de múltiples sensaciones de la mano del gato Cheshire -personaje ficticio creado por Carroll, en su obra Alicia en el país de las maravillas- es este tierno gato invitado, quien va presentando e introduciendo a los distintos personajes que pueblan la escena, siendo el hilo conector de las historias que van a contar.
Surge una comunicación continua entre “pequeños espectadores y personajes”. La introducción de estímulos novedosos, dinámicos, con colores y presentados a los bebés suavemente, es sin duda el ingrediente central que los mantiene atentos y receptivos, en continua interacción con las actrices -a través de sus personajes-, que le aportan la sensibilidad y la ternura que los termina de atrapar.
La bienvenida al espectáculo comienza desde la antesala, donde los espectadores deben dejar sus calzados y sus abrigos en un mueble acondicionado para ello y así se adentran en la sala un poco más cómodos; las butacas son almohadones en el suelo que crean un espacio de intimidad y calidez, generando además, una sensación de bienestar y relajación; las luces y la música son suaves y los niños se sienten atraídos por ese espacio creado sin siquiera haber comenzado. Indudablemente cada ingrediente mencionado predispone e invita a la situación. En este contexto de nítida comunicación se mueve y desarrolla todo el espectáculo.
Resulta oportuno aclarar que Cheshire está pensado para bebés hasta tres años, sin embargo, cualquier niño un poco más grande disfruta con la misma intensidad que un bebé, en cada escena y con cada personaje, de hecho así quedó reflejado en varias funciones en las que los hermanos mayores acompañaron a los más pequeños y se los vio cantar, bailar, jugar con pompas, interactuar con los personajes, con la misma energía que lo hicieron los bebés.
En Cheshire abunda la estimulación visual, el lenguaje corporal, la comunicación y cada personaje se acerca e interactúa directamente con los pequeños; además, esa influencia es recíproca, porque el niño, -explorador por naturaleza- se entrega a experimentar, a tocar, a propinar caricias a las afectuosas marionetas, los danzantes gusanos, los inquietos y simpáticos perros peludos y otros tantos personajes con los que son sorprendidos.
Cualquier descripción es pobre respecto a lo que se puede vivenciar durante el transcurso del espectáculo, es mágico el mundo que se produce en la sala, tal es así que por momentos se fusionan en una verdadera comunidad: bebés, objetos, personajes; todos convergen para comunicarse y expresarse, disfrutando de esa conexión.
Quedan pocas funciones de esta honesta, estimulante y magnífica obra teatral para los bebés, un reconfortante espacio en cual al niño se le deja “ser”, “participar” y “sentir”. Para dejarse sorprender y pasar una tarde sensible, siguiendo la llamada del gato Cheshire que sabe cómo guiar al público, en un viaje mágico por el universo infantil.
Leer: Anamakanda de la Cía Línea 6. Teatro para bebés en el Teatro Cánovas.
El lenguaje primigenio de las sensaciones
Teatro Línea 6
Producciones Teatro de los Orígenes
Dirección y Dramaturgia:
Miguel Palacios
Intérpretes:
Laura Vera, Carmen Titos, Ana Jáner
Técnico y regiduría:
Marina Giménez Devesa
Escenografía, indumentaria y cartelería:
Leticia Pérez
Espacio sonoro:
Miguel Ángel Barba López
Edad recomendada: de 0 a 3 años