Una despareja pareja de hermanos a los que las circunstancias y la vida en sí misma les lleva a plantearse el asesinato….¡de su propia madre enferma!
Autora: Rosa Parra | Fotos: Web
Teatro Cervantes. 05/10/2013.
Una puesta en escena impecable que te sitúa rápidamente en un quiero y no puedo; donde lo que se ve está avejentado y lleno de manchas de humedad. Pero lo que no se ve y se descubre a lo largo de la obra es aún peor: un muro pegado a la balconera a medio palmo de las narices. Toda una declaración de principios ante la incomunicación que son las viviendas de hoy en día, a la vez que nos sugiere lo que tienen de ocultación al exterior una casa y la familia que en ella mora. Las peores intenciones tienen lugar dentro de la familia. Y si dentro de una casa aislada al mundo suceden cosas monstruosas, dentro del ser humano nos podemos imaginar hasta dónde puede llegar la maldad, tanto como la bondad.
Esta obra de teatro viene avalada por el éxito de taquilla en el Teatro La Latina de Madrid, donde el papel de Paco lo interpretaba Fernando Tejero.
La función, perfectamente interpretada por Paco Tous y Pepón Nieto, nos lleva de la mano mediante un diálogo hilarante, por los vericuetos de la relación entre dos hermanos que comparten (en teoría, porque en la práctica como ocurre en la vida misma, solo se lo carga a cuestas el menor de ellos) el problema de una madre enferma e imposibilitada en una cama debido a un ictus.
Las carcajadas resonaban en la sala por la frescura de los diálogos, la fluidez de la interpretación y la verdad en la caracterización de los dos magníficos actores que la ponen en escena. Pero debajo de esa risa late la incomodidad de estar asistiendo como espectadores mudos y forzados, a algo que nadie quiere ver. Todos preferimos mirar para otro lado cuando la situación nos desborda y por mucha risa que le queramos echar y mucha broma con la que nos refiramos a ella, la verdad es que es un drama actual al que muy pocos saben darle solución: con la amplitud de la esperanza de vida no se ha alcanzado la calidad de la misma, y en una casa sí y en otra también se producen en algún momento situaciones de enfermos terminales que se quedan a cargo de otros a los que sin querer limitan la vida. Si además los enfermos han sido y siguen siendo personas tiranas y abusonas (como era el caso de la madre de estos hermanos) las emociones y sentimientos llegan a la ebullición.
Todo este magma oculto, a duras penas además, se esconde debajo del formulismo y el deseo de aparentar “aquí no pasa nada”, con las formulas de cortesía aprendidas desde pequeños en cada casa (¡esos besos a dos carrillos y repetitivos que se dan los hermanos cada vez que se tienen que despedir, después de insultarse o abusarse!) que imprimen singularidad y personalidad a cada familia y constituyen su signo de identidad.
Los autores, Jordi Sánchez y Pep Antón Gómez, han sabido transmitir un texto real, con un sarcasmo y una ironía rayana en la aberración, pero ya sabemos que en estas cosas la realidad siempre supera a la ficción.
Sinopsis
Una madre con ya demasiados años, una embolia, una gripe y muy pocas ganas de morirse; un hijo cercano a los 50 con una mujer posesiva y medio calva, una empresa que se hunde y una jubilación que se aleja. Otro hijo de 42 que la cuida, la baña, la peina y casi la mata ( a la de la embolia), muchas libretas, pocos ahorros, una casa que vender…
Ficha Técnica
Director: Pep Antón Gómez
Ayudante de dirección: Ayanta Barilli
Interpretación: Paco Tous y Pepón Nieto
Diseño de escenografía: Silvia de Marta y Max Glaencel
Realización de escenografía: Mambo Decorados y Sfumato
Técnico de iluminación y sonido: Kiko García.
Productor ejecutivo: Jesús Cimarro