Teatro Cánovas, Málaga. 13/04/12
Texto: José Antonio Triguero | Fotos: malojavio
Hay ocasiones en las que el programa de mano que acompaña a un espectáculo puede despistar o confundir, pero en este caso el terreno en el que se mueve este "Viaje al crepúsculo del amor" es certero: entre el "cabaret canalla y el sórdido club de jazz".
También podríamos decir que es un concierto representado. Se hace con la poesía, ¿por qué no hacerlo con un ramillete de canciones? Trece son los cortes; el 13 es el número del ave fénix.
Las cenizas, en el mejor de los casos, son el rastro que va dejando tras de si un poeta, también un poeta de canciones. Una propuesta basada en poemas es solo eso, cenizas, y por lo tanto, nostalgia y amor.
Sergio Domínguez y Rebeca Torres cantan, bailan, interpretan pero sobre todo, se miran a los ojos. Y miran a los espectadores. Su cabaret mestizo es la propia calle, la propia vida. Y por eso la desnudez de sus evoluciones, sin artificio ni voces impostadas, pone a la misma altura la grada que el escenario; en este sentido, la obra es "realista", se aleja de la tragedia y también de la comedia. El resultado es humor con sello propio, que discurre fácil en el tono cercano de la pieza.
La propia música comparte el mismo enfoque, discreta, limpia y dispuesta a arropar la acción, a dejarse seducir por la bonita voz de Rebeca o a buscar complicidades con los guiños de Sergio.
Igualmente, el nombre de la compañía, Sparring, deja abierta la incógnita, pues ¿quienes son los luchadores? ¿necesitaremos este decálogo extendido de canciones para evitar golpes y torceduras? Seguramente algo amortiguará.
"Viaje al crepúsculo del amor"
Idea: Sergio Domínguez
Dirección Musical: Álvaro Gandul
Intérpretes:
Sergio Domínguez
Rebeca Torres