Texto: Alberto Medina López | Fotos: Mandrágora Teatro
Con una sala a rebosar en su segundo pase, con la garantía de calidad que posee la compañía Mandrágora Teatro, se presenta al público una historia de amor que, aunque discurre en un pequeño pueblo de la Serranía (Genalguacil), bien podría ser idéntica a la que se repite en cada rincón del planeta.
En el transcurso de la obra, que a todo el público le pareció corta, seremos espectadores de las desventuras amorosas de una repostera con éxito internacional, Angelita la Molletes, y de un cantante frustrado, Lolo el de los Patacortas. Una obra que puede parecer dulce y sencilla, como una simple receta de piodiez, pero que en el fondo nos encontramos con algo tan amargo y complicado como una tarta de chocolate.
Desde un primer momento sus protagonistas, Raquel Casanova y Steven Lance, bajo dirección y textos de Pablo Díaz, se ganan al público. Es un eterno diálogo de lo que fue y no pudo ser, de sueños por cumplir más allá de las montañas. Ella tiene los pies en la tierra (o las manos en la masa) pero sueña entre la absenta y la canela. Él ha querido hacerse un hueco pero después de años de ausencia vuelve con las “pataslargas” al pueblo que lo vio crecer. A través de canciones en un particular reto nocturno, los protagonistas intentarán volver a la senda del amor, la misma que una vez los piodiez (o Fangoria) hicieron que tomaran caminos distintos en la vida. La complicidad con el público es total, y el humor en su justa medida, como la famosa absenta del lugar.
Un pequeño espectáculo que con sus bromas y canciones llegará a todo el público sea cual sea su edad. Si te has quedado con ganas de saborear los sabrosos piodiez de Angelita la Molletes, tendrás que acudir a la Sala Joaquín Eléjar (calle San Juan Bosco, 79 -Colectivo Cultural Maynake-) el próximo Sábado 20 a partir de las 20,00h.
¡¡Buen provecho!!!
Angelita la Molletes y Lolo el de los Patascortas se han querido desde siempre., eso lo sabe todo Genalguacil, pero hace muchos años Lolo se fue a Madrid a triunfar en el mundo de la canción y Angie se quedó en el obrador de pastelería de su padre haciendo dulces de Pío X. Cada año, por fiestas, Lolo acude a tocar a la verbena del pueblo, y siempre pasa por la puerta de atrás del obrador. Hoy, por primera vez en años, la puerta está abierta. Hoy Lolo tiene una oportunidad para reconquistar a su amor… Armado únicamente de su guitarra y rodeado de Pío X y molletes… ¿podrá conseguirlo?
Texto: Pablo Díaz.
Interpretes: Raquel Casanova y Steven Lance.
Dirección: Pablo Díaz.
Diseño Iluminación: Manuel Castillo.
Música: Steven Lance.
Vestuario: Mandragora Teatro.
Escenografía: Mandragora Teatro.