12/01/2017. Teatro Cervantes. 34 Festival de Teatro de Málaga,
Texto: Elisabet González | Fotos: Yolanda Montiel
Zenit, la última creación de Els Joglars llega al 34 Festival de Teatro de Málaga, para dar a los espectadores malagueños dos sesiones espléndidas de sarcasmo e inteligencia a partes iguales. Quién no ha visto una representación de Els Joglars, me atrevo a decir que no conoce el Teatro. La compañía catalana fundada en los años 60 en una España convulsa y complicada, ha sido fiel a sus principios: crítica social, ironía y sátira refrescante se mezclan en sus obras, siempre repletas de mensaje y buenos actores. Els Joglars han sido criticados y amados en los más de cincuenta años que llevan de profesión a las espaldas y siempre se han defendido con unas armas que dominan a la perfección: la palabra y su aguda e inquietante puesta en escena. Y Zenit no podía ser menos.
La producción de Ramón Fontserè pone en entredicho la situación actual de la profesión de periodista. La compañía, con su sello personal, invita al pensamiento crítico, abre una puerta secreta de nuestro pensamiento e intelecto a la cual no estamos acostumbrados a entrar. Las ideas plasmadas en escena incomodan al espectador, para que salga del teatro con la cabeza y el alma en plena ebullición. Y así sucede. Sabemos que las creaciones de estos juglares no dejan indiferente, ni antes ni ahora en las que no participa directamente su histórico creador Albert Boadella. Aunque su ayuda y participación sigue presente, como nos contó en una entrevista Juan Pablo Mazorra, uno de los actores protagonistas. Incluso en escena, hay un guiño hacia su persona.
La crónica empieza en el origen, para enseñarnos una historia del mundo jamás contada. Llegamos a nuestro presente con Zenit el periódico recreado por los actores para mostrar lo que ellos denominan Herejes de 4 gigas. El espectador intenta asumir lo que el periodismo tiene que ofrecer a la sociedad actual. Y digo intenta asumir porque seguramente ni siquiera entiende en su totalidad. El teatro de Els Joglars se ha de interiorizar, las ideas no se captan al primer vistazo. Hay un trabajo intrínseco, que se percibe pero se ha de pensar. Es Teatro en mayúsculas: texto hiriente se entremezcla con silencios incómodos, en los que la estética de la escena se torna hipnotizante. Cada detalle importa, cada foco preparado milimétricamente para captar la atención, cada elemento utilizado en escena, muchos y variados, tiene una finalidad importante. La música, deliciosamente escogida, como hilo conector, envuelve a los actores, al escenario y al público en una tela de araña, difícil de escapar. Y todo esto, crea una atmósfera única. La puesta en escena es simple e intensa a la vez. No hay nada en el escenario y entre líneas aparece todo, creando un espacio único y sensorial.
Las ideas importan y transforman. La información actual es transmitida por unos medios condicionados por las ventas. ¿Qué es más importante, los hechos o las ventas? Sugiere la machacada directora de Zenit, ¿Los artículos están creados por becarios mal pagados en los que los méritos son de otros? ¿La verdad está en una imagen? ¿Las noticias absurdas ganan adeptos? ¿Periodistas retrógrados de lápiz y papel o los Gutenberg del siglo XXI? Preguntas sin respuesta o con la respuesta al alcance de un #hashtag. El periodismo, como el gran edificio de Zenit, tiene goteras.
Y esto es el Fin de la Obra. Comienzan los aplausos de un Teatro Cervantes impresionado, salen los actores a saludar y nos quedamos esperando a los simios, los franceses y su revolución, los nazis, la rotativa entera y el resto de personal de redacción. Pero no, solo hay seis espléndidos actores en el escenario saludando, que han hecho un trabajo espectacular, llegando al cenit real.
Y lo que no sabemos es si periodismo actual ha llegado al Zenit, o al cenit. Por lo que parece al final de la obra, la mierda siempre sale a flote. Les invito a ver la Obra de Els Joglars y si son capaces, decidan ustedes mismos. ¡Bienvenidos al Circo Mediático!
Dramaturgia: Ramon Fontserè y Martina Cabanas
Actores: Ramón Fontserè, Pilar Sáenz, Dolors Tuneu, Xevi Vilà, Julián Ortega y Juan Pablo Mazorra
Dirección Ramón Fontserè