Texto: Rosa Parra | Fotos: Laura Fernández
Seguimos con el monográfico del ciclo dedicado a los artistas y creadores malagueños.
Hoy hablamos con Salva Marina, músico-vocalista que toca la guitarra y el piano, aunque “tontea” también con otros instrumentos
Nos encontramos con un más que escurridizo músico malagueño, que huye de las entrevista y de la “fama” y que a pesar de su juventud es uno de los más prolíficos de la actualidad. Participa en la mítica banda TabletóM, en la de Los Perrillos, antes llamada Experriens (banda de versiones), en el grupo de rock-incalificable Frutería Toñi y la banda de tributo-homenaje a los Allman Bhrother: The Filmore Band. Además también actua de forma individual con su Salva Marina y la Orquesta Imaginaria.
Es una extensa entrevista en la que salen muchos datos, nombres conocidos del panorama cultural y social de Málaga y del país. Todo ello, puede parecer algo caótico, sin embargo Salva es un músico magistral que además es sistemático y trabajador, que desmonta desde el primer contacto eso de que los artistas son bohemios y volubles. Bohemio no sé si será, pero desde luego, para nada voluble ni desdeñoso en sus relaciones personales; y en su trabajo es sistemático y constante. Una hormiguita trabajadora que además ha ejercido su oficio en televisión gracias a la carrera que estudió de medios de comunicación y audiovisuales (Arrayán, documentales, musicales…).
Esta entrevista ha sido posible gracias a la mediación de otro gran artista y músico de la ciudad, Ernesto Lasso de la Vega, que nos sirvió de enlace y que, con la hospitalidad que lo caracteriza, nos acogió en su casa para las fotos.
El hecho de que la fotógrafa de la revista Laura Fernández y Salva se conocieran desde hace años, facilitó la intimidad y la ocasión de que el artista se abriera contando anécdotas que nunca había contado en los medios de comunicación y recordaran circunstancias que han vivido conjuntamente y personajes que han pasado por sus vidas y por la vida de los malagueños.
Aforo Libre: ¿Cuando comienzas a introducirte en el mundo de la música y desde cuando te dedicas a “musiquear”?
S. M.: Desde pequeño he vivido el arte en mi casa (su madre es bailaora y tiene una academia de flamenco, Rosa es una de las figuras también míticas del panorama artístico malagueño; su padre es un erudito de la música en general y del flamenco en particular, músico aficionado también... ambos serían merecedores de una entrevista para este monográfico de artistas malagueños) Mi padre me enseñó a tocar la guitarra con cinco años, aunque luego he tenido la oportunidad de aprender con grandes maestros . Además toco el piano y la percusión. Por otro lado mi madre ha tratado y tenido amistad con lo más grande del flamenco que ha pasado por Málaga. Desde Camarón a Meneses. Todo eso me ha ido impregnando de saberes y presencias. Además estoy tocando en grupos desde que tenía 15 años, que eso curte mucho también. Luego por otra parte estudié Audiovisuales, lo que me ha permitido estar en contacto con otras facetas como la documentalista, la productora, la técnica de sonido…
A.L.: ¿Has venido a llenar el hueco de Rockberto en su banda Tabletóm?
S. M.: No hombre, eso es imposible, Rockberto ha significado algo muy grande en Málaga y eso es difícil de sustituir, soy vocalista en el grupo, como hacía él, pero lo hago a mi manera y sin intención de sustituir a nadie, con mucho respeto y muchas ganas, porque me gusta esa banda desde pequeño, la seguía y me influía en mi formación musical.
Recuerdan en estos momentos Laura y él la primera vez que Salva se subió a un escenario, fue precisamente en un festival de música donde también actuaba TabletóM Salva iba con Los Smouking, “que cantábamos en inglés y rock de forma muy particular (año 1993-4, aproximadamente) era un chavalín”. Rockberto se acercó a él para pedirle un papel de fumar. Se cayeron muy bien desde el principio, y poco a poco con el tiempo se fueron convirtiendo en amigos. Fue en la playa del pantano. 21 años después, la "casualidad" quiso que entrara en su grupo, cuando ya Rockberto había fallecido.
Salva nunca deja un proyecto colgado para coger otro, él compatibiliza todo. Así es de polifacético y de trabajador. Luego él también actúa y trabaja de forma individual, haciendo conciertos en lo que el artista denomina Salva Marina y la orquesta imaginaria
A.L.: ¿Qué es lo que más te gusta de todo lo que haces?
S. M.: Me encanta mi oficio y la música, componer, cantar y subirme a un escenario, sea solo o acompañado por mis diferentes bandas. Pero lo que de verdad me encanta y lo he descubierto ahora poco, es grabar un disco. Estamos grabando el 2º disco de “ Frutería Toñi”, y es un flipe total, hacerlo con medios y con un buen equipo, como estamos haciéndolo ahora, lo disfruto una barbaridad. Grabamos con el Puerto Record. Con Manolo Toro.
A.L.: ¿Cómo se titula el disco?
S. M.: Tengo mis días buenos que es el título de una de las canciones del disco y que hemos querido que sea el título genérico. Va a ser el segundo disco de Frutería Toñi.
A.L.: ¿Por qué ese nombre de la banda?
S. M.: Porque todos somos muy iconoclastas, no nos gusta lo rimbombante, y nos reímos mogollón de esos grupos que se ponen nombres tan estudiados y tan de pose, así que empezamos a decir chorradas cuando dijimos de ponerle nombre a la banda y este de Frutería de Toñi nos hizo reir mucho y nos gustaba a todos, y uno del grupo empezó a llamarnos a sí, y así nos hemos quedado. No es que lo decidiéramos a mano alzada ni nada de eso, es que se fue imponiendo por uso …. Ja, ja, ja
A.L.: ¿Tienes problemas con algunos de tus grupos, por prestigio, resaltar o algo así?
S. M.: Yo soy muy llano, y no me gusta trabajar con nadie que esté endiosado o practique el divismo. La música es un oficio más, maravilloso y del que estoy apasionado, pero me suelo agrupar con gente que la vive como yo, sin grandes pretensiones, así que no suelo tener encontronazos con otros músicos, ni en las diferentes bandas en las que participo, siempre se es que se toca juntos antes de entrar en una banda y si se conecta con la música es muy raro que no haya conexión a otros niveles también. Así que lo personal va detrás de lo musical y se funciona bien en ambos aspectos. Si no sincronizas con alguien tocando, no trabajas juntos en una banda.
A.L.: ¿Tenéis previsto algo próximamente, algún concierto, o bolo?
S. M.: Bueno las cosas, van surgiendo poco a poco, en la actualidad la grabación se lleva mucha energía y probablemente con los perrillos/ Experiens actuemos en la feria, en casetas y eso. Con TabletoM en breve estaremos en donde nos llamen.
A.L.: ¿Qué hay de tus otras facetas artísticas, como la de documentalista?
S. M.: El documental sobre Tabletón. En Cuba hice un taller de varios meses de producción de documentale; y, en Cuba hice ya cositas de este tipo, pero con el de Tabletón fue mi bautizo aquí en España. Entrevistamos a mucha gente, Todos somos estrellas es una reflexión sobre la fama; de Roberto he aprendido muchas cosas, pero lo principal el no darle importancia a la fama, lo importante es sentirte respetado por ti mismo, que la música que hagas tenga calidad, no es exactamente un biopic, lleva detrás mucha filosofía,.
En el Festival Internacional en Barcelona, llamado INEDIT, que es muy prestigioso, entre dos mil documentales seleccionaron a 30 para proyectar, y uno de esos 30 fue nuestro documental, que se ha presentado hace dos años en Málaga, durante dos semanas fue lo más proyectado en el cine Albéniz. Es una autoproducción y autogestión, sin capitales detrás, por eso vamos a intentar impulsarlo de nuevo. Hay mucho material sin editar, con el que podría hacer un nuevo documental, que quizás lo haga, por cierto. En el Video Club de Internet (Filmin) que tienen los hermanos Almodóvar lo han proyectado, también. Roberto murió en medio de la producción del documental, así que está y no está dentro de él.
A.L.: ¿Te gusta escribir y componer solo o con otros?
S. M.: Me gustan las dos cosas. Hemos cogido letras del poeta Jacinto Pariente, que colabora con Fruteria Toñi, o escogemos sonetos suyos; con mi bajista Curro García trabajo muy bien en equipo, tengo una conexión especial con él. No hay egos. No se imponen las ideas, se eligen las mejores.
A.L.: ¿Qué te pasa con el flamenco fusión?
S. M.: Ja, ja, ja, ¿quién te ha dicho que me lo preguntes?, me gusta el flamenco puro, los palos sin mezcla y las voces profundas. El Jazz también me gusta con raíces, el jazz clásico. Viaje a Nueva Orleans y me he hecho mi itinerario del jazz por allí. Lo que mejor canto es Jazz, por familia tengo disco de pizarra, antiguos, de mi familia, En fin que soy muy purista, no acepto la fusión por la fusión, quiero fusiones cuando están bien trabajadas, pero en general considero que están sobrevaloradas, y ha llevado al flamenco a rendirle pleitesía a otras músicas, cuando el flamenco por sí solo es inmenso.
A.L.: ¿Y con los verdiales qué es lo que tienes?
S. M.: Un amor inmenso, también. Estoy en una panda de verdiales, hago letras un poco iconoclastas, y rompo un poco por ahí componiendo letras actuales, pero la música la hago pura, me encante su sonido, lo escucho desde chico, mi padre me llevaba a la hermita de la Virgen de los Dolores, El Poveda (Povea) y otros que ahora son míticos. Me hice amigos de verdialeros, y el ser hijo de Boro me abrió las puertas de ese mundo y el poder colaborar con los grandes, gente muy buena, que me ha enseñado mucho. Escribo letras punky, de coña, como fandangos, cantadas con la música de siempre es una combinación explosiva para mí, que me motiva mucho. Pero en realidad en esta feceta me prodigo poco.
Mi madre es bailaora flamenco y me he criado en un tablao, las juergas flamencas las he vivido y he escuchado lo más grande: Camarón me regaló un crucifijo, Mi madre le regaló a él una guitarra, Diego del Gastor, Pepe Meneses, Bernarda, Paco Valdepeñas, Pansequito,…Amo tanto el flamenco que no me atrevo a hacerlo.
A.
L.: ¿Estás en alguna otra banda por ahí que no hayas mencionado, o tienes otro proyecto del que no nos hayas hablado?
S. M.: Bueno creo que no te he contado que ahora tengo un nuevo proyecto con una banda que se llama The Filmore Band. Tenemos entre manos un proyecto de sonar en homenaje a los Allman Brothers, en esa banda yo “emularía” a Greg Allman. Estoy muy ilusionado con este proyecto. También pasearemos esta banda por los escenarios.
A.L.: ¿Y tu último proyecto cuál es? Vamos, si tienes más aparte de todo lo que llevas para adelante.
Salva Marina: Tener una hija, que está a puntito de nacer, ¿te parece poco?
Le deseamos a Salva mucha suerte en su nuevo proyecto de vida, que es criar a Candela, y le auguramos un gran futuro como artista y una buena proyección en todo lo que inicie, pues realmente merece la pena su calidad no solo artística, sobre todo la humana. Una gran persona, un gran artista.
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