01/05/2022. 39 Festival de Teatro. Teatro Cervantes.
Texto: Elisabet González | Fotos: promocionales T/C
Diva es una obra que representa el principio del fin de una Diosa. Refleja las incapacidades del ser humano por coexistir con la pérdida y más, cuando se es la gran María Callas.
El Teatro Cervantes se llenó y se engalanó para presentar la obra Diva. La obra representa los últimos momentos de la soprano María Callas. Es una obra donde se muestra la decadencia y la pérdida de 'La Divina', como se conoció a la cantante en su momento de esplendor. Por momentos la obra de teatro se torna una ópera y la ópera se convierte de nuevo en representación teatral. Es la gran obra final de la pérdida de una Diosa.
Diva muestra la vida de la cantante en sus momentos más bajos, cuando reside en París, alejada de los escenarios y de la música. Cuando ya su vida carece de sentido, sin amor, sin público y sin prácticamente voz. ¿Dónde acaba el mito y empieza el ser humano? Se confunden en un ser enloquecido, enrarecido, consumido por el alcohol y los fármacos. La obra tiene vestigios de tragedia griega. Se entremezclan la verdad y la fantasía, las ilusiones de un personaje llevan al espectador a un clima de incomprensión y desesperanza. Vivimos el declive de una figura, de una estrella que se convierte en una mendiga. Mendiga de amor, por encima de todas las cosas.
En esta obra de Albert Boadella está muy bien representada la lentitud de unos días, que se van agotando. El clima de toda la escena es pesado. Se respira un ambiente cargante y en ocasiones crea incomodidad en el espectador. Los momentos de tensión se trasladan al patio de butacas convirtiendo la obra en algo difícil de digerir. Quizás eso es lo que se pretende. Las referencias a la vida y obra de la soprano en diversos idiomas, castellano, griego, italiano, inglés y francés se convierten también en un exceso de lenguaje innecesario.
Por contra, las actuaciones de María Rey-Joly y Antonio Comas son inmejorables y salvan la función, de todas todas. Ella se enfrenta a un papel complejo. Intenso emocionalmente, en interpretación y también musicalmente. María Rey-Joly, además de tener un gran reconocimiento en su carrera profesional, está trabajando como actriz cantante en varias obras teatrales. Su pose en el escenario es espléndida. La forma de transmitir con la voz y sin ella es magnífica. La capacidad de intercambiar posturas, ahora arrogante, ahora triste y vencida, sus gestos y toda la interpretación en su 
conjunto hacen que se lleve una gran ovación del público. El tenor Antonio Comas es el complemente perfecto. Alternando el papel de Ferruccio, su mayordomo y pianista con el gran amor de su vida, el magnate Aristóteles Onassis, hace un trabajo impecable. Los grandes momentos musicales interpretados por ambos bajo la dirección musical de Manuel Coves y las grabaciones realizadas por la Real Filharmonia de Galicia, convierten el resultado final de esta obra lírica-teatral en aceptable.
María Callas, ¿la Diva? O María Callas ¿la mujer?. En un momento final de la obra oímos: 'las mujeres como tu están hechas para ser amadas, no comprendidas'. Quizás esto nos lleve a no comprender, pero siempre a amar.
Clece Producciones
Autor y dirección Albert Boadella
Dirección musical Manuel Coves
Intérpretes María Rey-Joly y Antonio Comas
Arias y dúos de La traviata, Manon Lescaut, Norma, Madama Butterfly, Otello, La Wally, Tosca…
Música grabada por la Real Filharmonia de Galicia
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