22/06/2016. Festival Terral. Teatro Cervantes.
Texto: Françoise Chabassier | Fotos: Daniel Perez / TC
Coincidiendo con la llegada del verano y sus vientos calurosos, el Festival Terral 2016, nos trajo una muy agradable y refrescante propuesta, la presencia en el Teatro Cervantes de uno de los mejores violinistas de jazz del mundo, Jean-Luc Ponty.
Acompañado al piano por William Lecomte, el dúo trajo el repertorio con el que suelen trabajar con su grupo desde hace casi veinte años o sea composiciones de los 70, estándares de jazz e improvisaciones pero también algunas composiciones recientes. Durante la hora y media que duró el concierto, los dos músicos hicieron dialogar sus instrumentos con una intensidad impresionante que hipnotizaron a los espectadores. Entre muchas piezas musicales, interpretaron Point of no return, Desert crossing…del álbum, The Atacama Experience (2007). Con una gran maestría y en solo, William Lecomte, interpretó al piano, una pieza musical de una belleza que rozaba la perfección. Fue grandioso. Y de repente sonó el maravilloso Desert crossing de Jean-Luc Ponty con el sonido inconfundible de su violín eléctrico que cautivó la sala. Estos dos solos les valieron una salva de aplausos de parte de un público entusiasmado.
Jean-Luc Ponty obtuvo el primer premio de violín clásico, en 1960, en el Conservatorio nacional superior de música y danza de París, pero se sintió atraído por el jazz gracias a la música de Miles David y de John Coltrane. En 1967, le otorgaron el premio Django Reinhardt. A partir de 1972, después de su colaboración en el disco Honky Chateau de Elton John, Jean–Luc Ponty, empieza a utilizar el violín elétrico, con la cuerda C más baja. En los años ochenta usa el Violectra, un violín eléctrico modificado de cuatro cuerdas con una octava más baja para reemplazarlo por el Violectra de seis cuerdas con las notas C y F más bajas. Ponty fue pionero en la combinación del violín con MIDI, cajas de distorsión, pedales wah-wah, lo que le permite obtener este sonido tan peculiar y parecido a un sintetizador.
Se abrió su propio camino profesional apoyándose en su gran cultura clásica. Impuso su voluntad de popularizar sus campos de expresión y su gusto por las experimentaciones y los mestizajes estilísticos lo que le valió las críticas de sus compatriotas pero al mismo tiempo y gracias a todo esto y a su colaboración con Frank Zappa y John McLaughlin, se convirtió en uno de los pocos músicos franceses de jazz que consiguió una verdadera fama internacional. En 2015, salió a la luz su último álbum titulado Better late tan never compuesto con el leyendario cantante de Yes.
William Lecomte, trabajan con Jean-luc Ponty desde 1999 y desde 2007 toca con el grupo Vaya con Dios. Entre muchos artistas tocó con Claude Nougaro.
Él que fue pionero del jazz rock, él que hacía un “boeuf” en francés, un “jam” en inglés o una sesión musical en español con Stéphane Grappelli, Chick Corea, Stanley Clark y más y mucho más, él que inventó una manera de tocar el violín o sea un genio, se desplazó al Teatro Cervantes para encontrarlo casi vacío. Los espectadores hicieron una ovación en pie a los dos sublimes músicos pero en comparación con la Eurocopa que tenía lugar al mismo tiempo este magnífico concierto pasó desapercibido. ¡Qué pena! ¡Qué tristeza! Otra vez la cultura pisoteada y otra vez ganan los juegos del circo o sea el opio del pueblo.
Jean-Luc Ponty: violín
William Lecomte: Piano
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